La formación ultraderechista califica la decisión de “capricho” del alcalde
Para Vox se trata de una “decisión caprichosa del alcalde comunista de Zamora”. La Virgen de la Concha, Patrona de Zamora y que para una parte importante de su población tiene un especial significado además del religioso, no podrá ser velada en el Ayuntamiento con motivo de la celebración del Corpus Cristi, ya que según afirmó en su día el regidor municipal esta prohibición tiene por objeto “separar los actos religiosos y políticos con normalidad”.
“No deja de ser una justificación ridícula, ya que esa presencia de la Virgen de la Concha no tiene ningún carácter político”, afirma la ultraderecha. “Nada va a cambiar la política municipal porque la Virgen sea velada en el Ayuntamiento o en una capilla improvisada en la Plaza Mayor”, asegura la formación de Santiago Abascal.
Vox considera que esta actitud supone negar “el uso de las instalaciones municipales para una actividad religiosa, por el hecho de serlo. Nada más”. “Es un capricho que Guarido se da cada año, actuando con la prepotencia que le caracteriza”, zanja la formación.
Entienden, además, que el Ayuntamiento debería ser “la casa común” de los zamoranos, y estar abierto su uso a todos, con las limitaciones lógicas. “Pero esto que es tan simple, choca con la ideología de este alcalde que pasará a la historia de Zamora por estas actitudes sectarias, más que por sus realizaciones positivas, difíciles de descubrir”.