El expárroco del municipio mallorquín de Can Picafort fue condenado en 2016 a seis años de cárcel por agredir sexualmente a una monaguilla en más de diez ocasiones. El pasado mes de agosto salió de prisión, pero la Justicia ha vuelto a poner el foco sobre él
Fue el primer sacerdote de España al que la Iglesia, en 2013, aplicó la máxima pena contemplada por el Derecho canónico: la expulsión del estado clerical. El motivo: haber violado en más de diez ocasiones a una monaguilla de diez años, unos hechos que causaron gran conmoción en Mallorca y por los que en 2016 acabó condenado a seis años de prisión. El pasado mes de agosto salió de la cárcel, pero José Barceló Rigo, expárroco de la localidad de Can Picafort, afronta ahora un nuevo proceso judicial por un segundo caso de abusos sexuales a una menor de 13 años que acudía a recibir la catequesis en la parroquia de la que el acusado era rector. La Fiscalía reclama otros diez años de privación de libertad para el exsacerdote.