Valencia Laica considera un avance democrático que los Ayuntamientos, en este caso el de Valencia, ofrezcan a las familias la posibilidad de celebrar bienvenidas civiles para sus recién nacidos.
València Laica propuso a Joan Ribó, al inicio de su mandato como alcalde de Valencia, que el Ayuntamiento facilitase la celebración de bienvenidas y despedidas civiles. Ahora, la organización laicista se congratula de que las «bienvenidas civiles» puedan ser una realidad en la ciudad.
Las bienvenidas civiles suponen una carta de ciudadanía para las personas nacidas en un municipio, un acto cívico en el que se presenta en sociedad a una nueva persona que ingresa como ciudadana a la comunidad. Se trata por tanto de un rito de paso, compatible con las ceremonias que con carácter privado puedan realizar las familias en función de sus convicciones particulares.
Desde la jerarquía eclesiástica, el obispo Munilla no ha tardado en criticar esta posibilidad que ofrece a las familias el Ayuntamiento de Valencia. Parece querer ver una competencia con los bautizos religiosos, confrontar entre ambos ritos. En realidad, la celebración de una bienvenida civil no excluye que cada cual pueda celebrar sus propios ritos, son cuestiones compatibles, y en cualquier caso nos ninguna obligación para nadie.
Quepa señalar que este personaje, conocido también por sus ataques a los derechos de las mujeres, es uno de los integrantes de la Comisión Mixta con la Generalitat creada por el nostre President Puig el 28 de noviembre fruto de un acuerdo que València Laica denunció en su día por considerarlo como un nuevo Concordat a la Valenciana.
