La Asociación para la Defensa del Patrimonio inicia movilizaciones para reivindicar también más vigilancia para proteger el estado original del monumento, BIC, y que se paren las reformas que están llevando a cabo las monjas que lo habitan
Unas 200 personas se han manifestado para pedir la apertura de La Cartuja a las visitas además de otras reivindicaciones como dotar de vigilancia el monasterio para evitar que en su interior no se vulnere su estado original. Las redes arden entre los jerezanos que recientemente han visitado el monasterio y comprueban todo tipo de modificaciones y alteraciones en un Bien de Interés Cultural.