Como cada inicio de curso académico, UNI Laica-Granada ha participado –con todo el apoyo de Granada Laica– en las Jornadas de Recepción de Estudiantes de la UGR, celebradas los días 20 y 21 de septiembre, con un estand.
En él se ha informado al estudiantado y a otros miembros de la UGR de la persistencia en la Universidad de importantes elementos confesionales, como las asignaturas de religión católica programadas por la Conferencia Episcopal para que las maestras y maestros obtengan el título exigido por los obispos para poder impartir clases de religión (léase adoctrinar) en colegios e institutos. Además, permanece la Cátedra de Teología (católica) dirigida por los jesuitas, el Centro de Magisterio episcopal «La Inmaculada» adscrito a la UGR, santos y Vírgenes como patronos de Facultades y Escuelas, simbología cristiana en espacios académicos, etc. Sin olvidar la eventual promoción de actividades pseudocientíficas (basadas en diversas creencias, religiosas o no).
También destacamos los avances conseguidos, aunque sean muy insuficientes: se puso fin a la misa de inicio de curso convocada por el rectorado y a la mayoría de misas convocadas por los decanatos con motivo de los patronos (en diciembre veremos si sigue haciéndose en Farmacia), se han quitado algunos símbolos, se canceló una Cátedra confesional, se anuló un curso de constelaciones familiares y otros cursos doctrinales, dejaron de ofertarse talleres de reiki y reflexoterapia, etc.
Hay que señalar que UNI Laica y Granada Laica ya no están solos en sus reivindicaciones de laicidad universitaria. Desde hace unos meses, también las apoyan explícitamente, y así se lo han hecho saber recientemente a la rectora en una reunión presencial, las siguientes organizaciones (por orden alfabético): Frente de Estudiantes, SAT, CGT, Seminario Galileo Galilei, Seminario Otro Pensamiento es Posible, y USTEA.
Recordamos todo lo que queda por solucionar, tan grave, a la rectora de la UGR, al decano de Educación y al vicerrector de Estudiantes cuando pasaron por el estand, pero para nosotros lo más interesante es que cientos de estudiantes han tomado conciencia –a menudo mediante animadas conversaciones con las compañeras y compañeros expositores– de esta lamentable situación, más propia del nacional-catolicismo franquista que de una democracia. Este año hemos percibido mayor receptividad que nunca, lo que se ha reflejado en que unas 800 personas –la mayoría jóvenes– suscribieron el Manifiesto por una Universidad pública y laica, y la petición general por un Estado Laico, que incluye que el Estado no financie a ninguna confesión, religión fuera de la escuela, etc.
Muchas de las personas firmantes dejaron su contacto para mantenerse informadas de las noticias e iniciativas de UNI Laica y Granada Laica, y algunas se unieron a la asociación.