La agresión tuvo lugar tras propagarse el rumor de que una musulmana y un cristiano, hijo de la mujer agredida, mantenían una relación sentimental
Un nuevo episodio sectario ha golpeado esta semana el Egipto rural. Una turba de vecinos musulmanes atacó e incendió varias viviendas de un pueblo en el sur del país árabe tras propagarse el rumor de la relación entre una musulmana y un cristiano.
Los altercados sucedieron el pasado viernes, pero han trascendido este jueves. Según un comunicado de la iglesia ortodoxa copta, una multitud asaltó y prendió fuego a siete casas de cristianos en el pueblo de El Karm, en la provincia de Al Minya, a unos 300 kilómetros al sur de El Cairo. Además, la madre del copto que supuestamente mantenía un romance con una vecina musulmana fue arrastrada fuera de su vivienda. En plena calle la turba le arrancó la ropa después de que su vástago huyera de la localidad.
«Nadie hizo nada y la policía no adoptó medidas preventivas antes de los ataques», se lamenta el cura local, Anba Makarios, quien asegura que la familia cristianainvolucrada denunció las amenazas la víspera del ataque. Según su relato, los agentes llegaron al lugar del incidente dos horas después de que comenzara la disputa y arrestaron a seis personas.
En un comunicado publicado este jueves, el patriarca de la iglesia ortodoxa copta Teodoro II ha instado a la coexistencia y ha pedido que no se usaran los últimos acontecimientos para «incitar la refriega sectaria». A su juicio, las fuerzas de seguridad han prometido arrestar a los responsables y llevarlos ante la Justicia. Al Azhar, la institución suní más prestigiosa del mundo, ha condenado los ataques y ha anunciado que un comité de jeques y sacerdotes coptos viajarán al pueblo para tratar de solucionar el asunto.
Anba Makarios ha pronosticado que el comité obligará a los cristianos , como ha sucedido en el pasado, a aceptar las «humillantes» condiciones de la reconciliación. «Si hubiera sido la relación entre un musulmán y una cristiana, los cristianos no habrían respondido de esta manera (…) Es una desgracia para loshombres honestos permanecer en silencio mientras aceptas, ves o escuchas esto», ha agregado.
Los fieles de una de las iglesias más antiguas de Oriente -una minoría que representa alrededor del 10% de la población egipcia- padecen desde hace décadasdiscriminación en el acceso y promoción dentro de la administración y son blanco de ataques sectarios cada vez más frecuentes ante la pasividad de las fuerzas de seguridad.
Una y otra vez un rumor huérfano de pruebas es el responsable de encender laviolencia sectaria en los pueblos egipcios. El supuesto cautiverio en una iglesia de una cristiana conversa al islam, la desaparición de una joven o el amor prohibidode un fiel copto con una vecina musulmana destrozan la paz y convierten los lugares más recónditos del país árabe en un infierno. En la mayoría de los casos, los encargados de restaurar el orden son comités formados por líderes destacados del municipio que terminan tomándose la Justicia por su mano.