El gobierno ucraniano los echa por estar bajo la jurisdicción de Kiril
Los fieles de la Iglesia ortodoxa rusa históricamente ligada a Moscú (UPZ) salieron a las calles de Kiev para exigir que se anule la expulsión de los monjes de la «Lavra de las Cuevas».
La administración de la institución, propiedad del Estado ucraniano, había ordenado a todos los miembros de la UPZ que abandonaran el territorio monástico antes del 29 de marzo por la rescisión de su contrato. Así lo afirmaba un aviso emitido por el director general, Aleksandr Rudnik, que se publicó también en el sitio web oficial de la Lavra, aunque luego lo eliminaron.