A falta de cartera que gestionar, el político de Vox se ha dedicado a apoyar algunas de sus pasiones desde el Gobierno autonómico en sus 44 los desplazamientos oficiales.
Seis meses lleva el vicepresidente de Castilla y León, Juan García Gallardo, en actos taurinos, que le encantan y a los que accede gratuitamente, y en celebraciones religiosas. Su actividad política se limita a acudir a este tipo de eventos e insultar a la oposición desde su sillón en las Cortes. Ayer mismo insultaba en el Parlamento autonómico al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, a quien calificó como «el líder de una banda criminal»