Plataformas ciudadanas presentan en el Congreso un simbólico recurso de inconstitucionalidad contra el punto de la Ley Hipotecaria que ha permitido a la Iglesia registrar a su nombre miles de bienes públicos
Plataformas ciudadanas y colectivos cristianos presentan en el Congreso un simbólico recurso de inconstitucionalidad contra el punto de la Ley Hipotecaria que ha permitido a la Iglesia registrar a su nombre miles de bienes públicos en las últimas décadas, entre ellos la Mezquita de Córdoba.
Con esta iniciativa, Europa Laica, Redes Cristianas, y las Plataformas Mezquita-Catedral de Córdoba y de Defensa del Patrimonio Navarro instan a los partidos políticos a impedir lo que califican como “la mayor amnistía registral inmobiliaria de historia de España”.
Dado que la ley no les faculta para promover un recurso de inconstitucionalidad, han acudido este jueves al Congreso para reclamar la intervención de quienes sí pueden interponerlo. “Buscamos 50 diputados o senadores libres, sin ataduras de partido, que libremente defiendan la legalidad constitucional, separen los bienes civiles y los bienes eclesiásticos y que impidan esta apropiación de bienes a favor de la Iglesia católica”, explica Carmen Urriza, de la Plataforma en Defensa del Patrimonio Navarro, que lamenta la inacción de los partidos políticos, especialmente del PSOE a la hora de atajar esta situación.
“Sí nos han expresado su apoyo los parlamentarios de la Izquierda Plural y también diputados del grupo Mixto pero sin el concurso de los partidos mayoritarios no se puede promover ese recurso de inconstitucionalidad”, explica Urriza, dado que la ley exige un mínimo de 50 parlamentarios para interponerlo.
Protestan contra el artículo 206 de la Ley Hipotecaria de 1946 que ha permitido a los obispados poner a su nombre viviendas, casas, tierras e iglesias sin demostrar que son los propietarios de todo ello.
Ese polémico punto va a ser derogado en la reforma de la Ley, actualmente en tramitación parlamentaria, pero estos colectivos quieren que la Iglesia devuelva a manos públicas todo el ingente patrimonio que ha expoliado en los últimos años. “Hablamos de iglesias, basílicas, cementerios, viñedos, monumentos….de todo”, explica Urriza.
Uno de los exponentes más claros es lo ocurrido con la Mezquita de Córdoba. “Evidencia una voracidad inmobiliaria de la Iglesia católica que va hasta el extremo de haber registrado incluso la marca Mezquita para hacer uso comercial de ella y que no pueda usarse ese nombre por otras personas. Estamos hablando de la vigencia en el siglo XXI de normas confesionales y de una gran indefensión ciudadana porque estamos atados de pies y manos ya que son los políticos los que tienen que actuar y no lo hacen”, ha lamentado Antonio Manuel Rodríguez de la Plataforma Mezquita de Córdoba.
En el acto han estado presentes también varios colectivos de cristianos de base que, desde dentro de la Iglesia, se oponen a que la Iglesia cuente con privilegios al margen del resto de ciudadanos. “Como defensores del Evangelio, no defendemos la propiedad, sino que pertenezca al pueblo lo que es del pueblo. Que la Iglesia católica actúe de este modo nos parece una falta de ética”, ha denunciado el sacerdote Enrique de Castro, de Redes Cristianas.
Estos colectivos piden una auditoría de todos los bienes registrados de forma irregular por la Iglesia católica así como un estudio sobre su valor económico ya que, recuerdan, el régimen de privilegio fiscal de la Iglesia hace que no tributen por muchos de ellos.