«Nos encontramos en el Real de El Rocío, celebrando un nuevo Pentecostés, que muchos habéis llamado El Rocío del reencuentro. Como bien sabéis la Virgen ha estado en Almonte treinta y tres meses consecutivos. Nada nuevo en la historia devocional rociera, pues en otros episodios históricos la Virgen ha permanecido durante períodos prolongados de tiempo entre los vecinos del pueblo que la tiene por Patrona desde 1653″, ha apuntado del obispo de Huelva, Santiago Gómez Sierra, en la homilía de la Misa Pontifical de Pentecostés 2022.
Después de dos años, «de nuevo nos hemos reunido aquí, como la primera Iglesia, junto con María, la madre de Jesús. Hoy, esta asamblea, integrada por tantos hermanos y hermanas peregrinos procedentes de diversos lugares como representan las ciento veinticinco hermandades filiales, también está llamada a adentrarse en la experiencia pentecostal».
El obispo de Huelva ha señalado que el próximo 19 de junio, los andaluces» hemos sido convocados para elegir a nuestros representantes en el Parlamento autonómico. Los católicos votamos a diferentes partidos, pero todos debemos tener en cuenta las afinidades o incompatibilidades de nuestros principios morales con los proyectos, programas y actuaciones de cada uno de ellos».
Los obispos de las diócesis de Andalucía, en una nota publicada el pasado día 2, «recordamos, que en esa coherencia con la fe cristiana, es necesario respetar el derecho a la vida humana, inviolable desde su concepción hasta su muerte natural; el reconocimiento, la promoción y la ayuda a la familia, como unión estable entre un hombre y una mujer, abierta a la vida; la protección del derecho de los padres a educar a sus hijos según las propias convicciones morales y religiosas; el respeto a la dignidad de toda persona, a la libertad religiosa, a los valores espirituales y a la objeción de conciencia; la defensa y ayuda a los más débiles de la sociedad, como ancianos, jóvenes, parados e inmigrantes».
Ha incidido que «estamos apelando a principios morales accesibles a la razón; porque hay asuntos que no deben estar sujetos a diferentes estrategias de partido, sino que son temas exigidos por la ley natural, por la razón, por el verdadero humanismo».
Por otra parte, ha indicado que este Rocío del reencuentro «es mucho más que la posibilidad de volvernos a ver en este hermoso lugar. Las personas, a menudo reducidas a individuos desvinculados que compiten o entran en conflicto entre sí, se abren a la experiencia de la comunión, ésta junto a «la fraternidad, la amistad, que acompañan las manifestaciones verdaderas de la fe, como hoy testimonian aquí los miles de peregrinos del Rocío».
Gómez Sierra ha pedido también en la homilía que la Blanca Paloma interceda «para que pare el horror de la guerra y el sonido de las bombas en tantas partes del mundo, especialmente en la nación ucraniana; para que seamos artesanos de amistad y concordia en todos los ámbitos de nuestra vida, que estemos cerca de los refugiados, de los inmigrantes, de los pobres, de los que no cuentan, de los enfermos».