Han iniciado una campaña a través de change.org por entender que viola la separación de poderes entre Estado y religión
El próximo 15 de septiembre, tal y como adelantó HOY, la Virgen de las Angustias se convertirá en alcaldesa perpetua de Navalmoral al recibir el bastón de mando, en el acto que cerrará el 75 aniversario de su proclamación como patrona.
Un nombramiento, el de alcaldesa perpetua, que ha despertado controversia desde el mismo momento en el que lo planteó el Grupo Independiente, a propuesta de la Asociación de la Virgen de las Angustias, y su posterior debate en el pleno, que motivó una modificación del Reglamento de Distinciones Honoríficas al no recogerse esa figura.
Ahora, a un mes de ese acto, un vecino ha promovido una recogida de firmas, a través de la popular plataforma change.org, solicitando al pleno que reconsidere esa proclamación por entender que no se respeta la separación de poderes entre Estado y religión.
En su opinión, viola el principio de aconfesionalidad del Estado y de sus instituciones, basándose en el Artículo 16.3. de la Constitución: «Ninguna confesión tendrá carácter estatal. Los poderes públicos tendrán en cuenta las creencias religiosas de la sociedad española y mantendrán las consiguientes relaciones de cooperación con la Iglesia Católica y las demás confesiones».
La recogida de firmas ha empezado a circular en el fin de semana por las redes sociales, llevando algo más de un centenar en el momento de redactar esta noticia.
En pleno en agosto de 1941
La información sobre esa iniciativa nos da pie para avanzar el interesante artículo que publica el Cronista Oficial, Domingo Quijada, en la edición mensual de HOY, que sale hoy martes, sobre el pleno que se celebró el 29 de agosto de 1941 para aprobar el nombramiento de la virgen como Excelsa Patrona.
La petición la hicieron entonces las directivas de la Asociación de Nuestra Señora de las Angustias y de los Caballeros de la Virgen de las Angustias «suplicando al Ayuntamiento que tenga a bien reconocer oficialmente, en sesión solemne, el Excelso Patronato de la Santísima Virgen de las Angustias sobre esta Villa de Navalmoral de la Mata; y, a la vez, que esta Villa sea colocada pública y solemnemente bajo su amparo y protección».
Y así lo aprobó la Corporación, que presidía el banquero José de la Cámara, «por aclamación y sin discusión, con el mayor entusiasmo…, a fin de no olvidar los favores dispensados en todo tiempo a través de su devota Imagen; ni la memorable fecha del día 15 de agosto de 1936 que, cuando mayor era el furor del enemigo y sus armas estaban irradiando fuego a torrentes por todas partes, y este pueblo en frente abierto de combate, cesaron completamente durante las 24 horas del mismo (en realidad, fueron cuatro días) las armas automáticas del adversario de tierra y aire, por la intervención afortunada de Nuestra Señora de las Angustias, quien nos dio un día de verdadera paz y tranquilidad…».
Dos semanas después de su aprobación por el pleno, el 15 septiembre, el pueblo de Navalmoral rindió homenaje a su patrona «como agradecimiento por los hechos relatados», señala Quijada.