La portavoz de la Generalitat y consellera de Territorio, Vivienda y Transición Ecológica, Sílvia Paneque, ha defendido este martes la entrega de la Medalla de Honor del Parlament a la Abadía de Montserrat con motivo de su milenario, y ha desligado la institución de los casos concretos de pederastia. Así se ha expresado Paneque en la rueda de prensa posterior a la reunión del Consell Executiu en el Palau de la Generalitat, en referencia a las protestas previstas este martes por víctimas de abusos sexuales de la Iglesia contra la Medalla de Honor que el Parlament otorgará esta tarde a la Abadía de Montserrat. «Diferenciamos a las personas que han causado estos abusos y las víctimas de los abusos de la institución en su globalidad. Si señalamos a una institución en su globalidad, al final no señalaremos nada», ha expresado Paneque. «TIENEN NOMBRES CONCRETOS» La portavoz ha subrayado que el Govern siempre ha mostrado el apoyo a las víctimas de abusos sexuales, pero que «estas afectaciones tienen nombres concretos, y la institución en su globalidad es la que está reconocida por esta medalla». Asimismo, ha dicho que la entrega de la medalla es fruto de un acuerdo entre los grupos parlamentarios, y que el mismo PSC durante la pasada legislatura hizo una tramitación legislativa en apoyo a las víctimas. «REPRESENTA EL SENTIMIENTO DE CATALANIDAD» Según recoge la página web del Parlament, la Medalla de Honor reconoce este año «la trascendencia del monasterio que, más allá de ser el centro devoción religiosa más popular de los catalanes y las catalanas, representa el sentimiento catalanidad, de arraigo en Cataluña, de todo un pueblo, de toda una nación». El Parlamento otorga la Medalla de Honor desde el año 2000 a personas, colectivos o instituciones que «merecen un excepcional reconocimiento».
Autoridades públicas en actos religiosos
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