Las obras están valoradas por los servicios técnicos municipales en unos 48.000 euros y afectarían con mayor urgencia a la cubierta de esta edificación ya documentada en 1642, en especial a la correspondiente a la sacristía, que sufrió daños y un hundimiento parcial tras los temporales de hace dos años.
El Ayuntamiento de Polanco ha iniciado negociaciones con el Obispado de Santander para la firma de un convenio que permita ejecutar las obras de mantenimiento necesarias en la ermita de Santiago, en Mijares, en especial la reparación del tejado, dado el estado de deterioro del mismo.
Las obras están valoradas por los servicios técnicos municipales en unos 48.000 euros y afectarían con mayor urgencia a la cubierta de esta edificación ya documentada en 1642, en especial a la correspondiente a la sacristía, que sufrió daños y un hundimiento parcial tras los temporales de hace dos años.
La alcaldesa de Polanco, Rosa Díaz Fernández, ha detallado que este templo es propiedad del Obispado pero la reparación es «una petición casi unánime» de los vecinos de Mijares, además de «una obligación» al tratarse de un patrimonio del municipio y de los habitantes del barrio «que es necesario mantener sea quien sea el propietario».
Ha avanzado que las conversaciones con el Obispado pretenden definir de qué manera el Ayuntamiento puede colaborar en la preservación de este edificio patrimonial, para evitar que avance el deterioro, a cambio de una cesión de uso del inmueble para acoger algún tipo de evento cultural dirigido a los vecinos del barrio.
Rosa Díaz ha indicado que el primer contacto entre Ayuntamiento y un representante del Obispado es consecuencia de un acuerdo de la la Junta de Gobierno Local, por el que se requirió la pasada semana al Obispado la ejecución, en el plazo máximo de tres meses, de las obras necesarias para el mantenimiento de la ermita.
El requerimiento anunciaba que, en caso de no realizarse los trabajos, el Ayuntamiento los llevaría a cabo de manera subsidiaria, girando los costes luego al Obispado, dada la necesidad de evitar nuevos desperfectos en una ermita de gran arraigo entre los vecinos de Mijares, que hasta ahora se habían encargado del mantenimiento y de celebrar en ella la fiesta de Santiago.
La alcaldesa ha recordado que este requerimiento al Obispado es consecuencia de la falta de respuesta a anteriores peticiones realizadas el pasado año para que se reparase el tejado del templo, ante el temor del que avanzasen los desperfectos con el paso del tiempo.
Para comprobar el estado del templo, recientemente la alcaldesa y los concejales de Obras y Barrios, Avelino Rodríguez y Fernando Sañudo, han realizado una inspección a la ermita de Santiago.