La confluencia urge a la aprobación de un Plan Director que proteja todo el conjunto monumental declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.
Los abusos de la Iglesia Católica sobre monumentos declarados Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, a través de su inmatriculación ilegítima o gestión privatizada se extienden a lo largo y ancho del país, y son particularmente graves en otras ciudades andaluzas. El caso de la Mezquita-Catedral en Córdoba es paradigmático.
Después de 30 años, el Patio de los Naranjos de la Catedral debe volver a ser una plaza pública como lo fue hasta 1992. Así lo ha exigido la coalición encabezada por Podemos e Izquierda Unida tras recordar que este antiguo recinto de la mezquita fue inmatriculado por la Iglesia católica junto a otras “dependencias anexas” a la Catedral, como la Giralda, por 30 euros. En la actualidad, el Patio de los Naranjos forma parte de la visita turística de la Catedral, por lo que hay que abonar una entrada para acceder a su interior y poder disfrutar de lo que, hasta la Expo del 92, fue una plaza de acceso público y gratuito.