Desde esta federación esperan que “esto signifique que la Administración empieza a tomarse en serio la libertad religiosa y que va a trabajar para que todos los alumnos, elijan la asignatura de Religión que elijan, vean respetados sus derechos, así como todos los profesionales”.
FCAPA ha expresado “multitud de trabas para la asignatura de Religión, como horarios intempestivos, recortes injustificados – de horas lectivas y profesores – y limitaciones laborales y organizativas que ahora se imponen a la asignatura de Religión Católica”.
Por otra parte, la federación “anima a las comunidades islámicas a que inviten a los países islámicos a la reciprocidad de trato a la Religión Católica, facilitando su presencia social y educativa como sucede aquí”.
Las APAS de los centros públicos
Desde la Federación de Asociaciones de Madres y Padres (FAMPA), que agrupa a asociaciones de la enseñanza pública, han recibido con satisfacción el anuncio de la Consellería de Educación valenciana de que se impartirá la Religión Islámica cuando haya un mínimo de 10 alumnos que lo soliciten.
Los padres católicos, agrupados en FCAPA, han expresado a RC que “FAMPA debe entender, de una vez por todas, que nuestro ordenamiento jurídico vigente no permite construir un sistema educativo totalmente público, y que lo que pretenden es que la Religión – se refieren sólo a la Católica, claro – ni puede ni debe estar fuera de las aulas”.
Los padres agrupados en FCAPA atribuyen a FAMPA un “doble juego”: quieren una enseñanza totalmente pública y laica – “como se expresa en su web con total claridad”, exponen a este digital – y ahora alaban que se imparta Religión Islámica, cuando se han ido denunciando diversas trabas en torno a la asignatura de Religión Católica.
