Musulmanes y evangélicos piden al 2016 diálogo en España y más apoyo a las minorías religiosas a través del cumplimiento de los acuerdos con el Estado, y los judíos celebran algunos logros alcanzados en el año que termina como la Ley de nacionalidad a los sefardíes.
El presidente de la Comisión Islámica de España (CIE), Riay Tatary, destaca entre los avances de 2015 el real decreto que organiza el Registro de Entidades Religiosas y el apoyo en la reestructuración de la Comisión Islámica de la que Tatary espera que sea “representativa, participativa y moderna”.
Entre los aspectos negativos, Tatary recuerda que no se han desarrollado “muchos” apartados del acuerdo de cooperación y se ha referido concretamente a los comedores escolares, la cesión de parcelas en cementerios municipales para enterramientos islámicos o a la falta de contratación de profesores de religión.
Precisamente, en el marco educativo, los musulmanes esperan que este nuevo año se amplíe la enseñanza religiosa islámica a Secundaria y Bachillerato, ya que en algunos colegios, según precisa Tatary a Europa Press, no es que se tenga que reunir a diez alumnos para impartir la asignatura sino que el 80 por ciento de los estudiantes son musulmanes.
Este pasado año ha estado marcado por los atentados de París y los musulmanes han tenido que explicar que el Islam no tiene nada que ver con los terroristas. Por ello, Tatary espera que en 2016 ya no se identifique a los musulmanes con estas acciones, se cambie el discurso del ‘nosotros’ y ‘vosotros’ y se eliminen las “paredes” que aún existen. Por otro lado, los musulmanes piden al 2016 “estabilidad” para España.
PENSIÓN PARA LOS PASTORES JUBILADOS
Por su parte, el portavoz de la Federación de Entidades Religiosas Evangélicas de España (FEREDE), Mariano Blázquez, considera que el 2015 ha sido un año “triste” para los protestantes en materia de libertad religiosa por el real decreto aprobado por el Gobierno sobre el derecho a la pensión de los pastores jubilados.
La Federación interpuso el pasado 20 de noviembre un recurso contencioso-administrativo contra este real decreto por considerar que “condena” a los pastores jubilados a que “no se les pueda reconocer el derecho de pensión”.
“Nos sentimos traicionados”, asegura Blázquez, al recordar que, tras la sentencia del Tribunal de Estrasburgo que condenó a España por el caso del pastor Manzanas –que no había obtenido esta pensión de jubilación–, el Gobierno les aseguró que iba a luchar para que la situación se subsanara. También, según añade, echaron de menos el apoyo de la Iglesia Católica aunque sí lo recibieron por parte de las otras confesiones.
En cuanto al futuro, Blázquez no prevé que se produzcan cambios importantes porque, a su juicio, ni el partido que aún gobierna ni los demás tienen “mucho interés” en avanzar en los asuntos que afectan a las minorías religiosas. “España sigue siendo o católica o anticatólica. Se reconoce la diversidad política y social pero no la religiosa”, lamenta.
Sobre la situación política de España, la FEREDE cree necesario que se tracen alianzas, que se forme gobierno y que se pacte sobre los temas fundamentales como la educación o la sanidad.
UN “BUEN” AÑO PARA LOS JUDÍOS
Mientras, el presidente de la Federación de Comunidades Judías de España (FCJE), Isaac Querub, ha hecho un balance muy positivo del año, especialmente, por la aprobación de la Ley de nacionalidad a los sefardíes.
“El año 2015 ha sido bueno para la FCJE. Hemos alcanzado casi todos los objetivos que teníamos: incluir el estudio del Holocausto en la LOMCE, la reforma del artículo 510 del Código Penal y, desde luego, la tan anhelada ley de nacionalidad para los sefardíes del mundo entero, sin tener que residir en España o renunciar a la nacionalidad de origen”, ha indicado. Si bien, ha precisado que les quedan algunos retos en relación al kashrut (reglas alimentarias prescritas por la Torá), pero que esperan poder cumplirlos en 2016.
Atendiendo a la situación del mundo, Querub insiste en la “necesidad de diálogo, respeto y comprensión” y asegura que desde la Federación redoblarán sus esfuerzos “para que Occidente recuerde que sus fundamentos radican en los principios judeocristianos”.
En este sentido, pide al 2016 “paz en el mundo” y “que Israel encuentre la senda de la paz, la prosperidad y el diálogo con todos sus vecinos”. “Que el odio desaparezca de la faz de la tierra y entre todos construyamos un mundo mejor, que es la mejor herencia para las generaciones venideras”, pide.