La afectada no ha querido detallar la cuantía que va a recibir. Hay un segundo denunciante que espera a que la congregación determine a cuánto asciende la indemnización económica
El pasado 28 de febrero, el arzobispo de Pamplona y Tudela, Florencio Roselló, oficializó el cambio de rumbo de la Iglesia navarra ante los casos de pederastia al confirmar que la diócesis iba a indemnizar económicamente a las víctimas que hubieran sido reconocidas oficialmente por el Gobierno foral y que hubieran solicitado este tipo de reparación. Dichas indemnizaciones van a salir de los fondos de la Iglesia, pero con un matiz: los casos de abusos por sacerdotes “los reparará el Arzobispado” y, en los casos de congregaciones religiosas, “tendrán que repararlo ellos”. En cualquier caso, el Arzobispado se comprometía a mediar entre denunciantes y congregaciones. Con los Salesianos, no ha hecho falta. La congregación ha pagado ya la primera indemnización económica a una víctima navarra ―no ha trascendido la cuantía― y dirime ahora la cantidad a abonar a otro denunciante, con quien ya se ha comprometido a hacerlo.





