El gobernante del emirato de Sharjah, uno de los siete emiratos que integran los Emiratos Árabes Unidos (EAU), Sheikh Sultan bin Muhammad Al-Qasimi, ha hecho un llamamiento para devolver a los musulmanes la Mezquita-Catedral de Córdoba. Sultan Al-Qasimi ha hecho estas declaraciones a través de una entrevista canalizada por Sharjah News pocos días después de que Santa Sofía, en Estambul (Turquía), haya pasado a ser una mezquita tras funcionar como museo desde el año 1935. “Estamos exigiendo al menos el regreso de la Mezquita de Córdoba”, ha señalado el dirigente, quien ha añadido que “pregunté y me dijeron que el municipio entregó la mezquita a la Iglesia”, que es la actual titular del templo cordobés.
Durante el debate generado a raíz de este cambio, la Mezquita-Catedral de Córdoba ha sido utilizada en varias ocasiones para justificar la conversión en mezquita de Santa Sofía. Varios altos cargos de Turquía, así como historiadores o teólogos, han usado como ejemplo al templo cordobés ante las críticas internacionales por desechar la condición de museo a Santa Sofía, un templo que nació como basílica ortodoxa y que luego se convirtió en mezquita hasta pasar a ser el Museo Hagia Sophia.
A lo largo de los últimos años, Santa Sofía ha sido objetivo de reconversión por parte de quienes querían que se devolviera el culto al espacio, tanto cristianos como musulmanes. En 2006, por ejemplo, ya se estableció un espacio de este monumento Patrimonio la Humanidad como sala de oración para musulmanes y cristianos. Pero ha sido el actual presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdoğan, quien ha ejecutado el cambio.
Desde varias instancias internacionales, incluida la Unesco, se ha lamentado esta conversión y se ha solicitado a Turquía que se abra, como mínimo, un debate en torno a esta decisión. Aún así, Erdoğan ya ha anunciado que las oraciones se iniciarán a partir del 24 de julio. Precisamente a las críticas de la Unesco respondieron desde el gobierno turco poniendo como ejemplo a la Mezquita.
El ministro de Exteriores, Mevlüt Çavusoglu, afirmó que la Mezquita-Catedral de Córdoba se construyó como mezquita en el siglo VIII y fue convertida en iglesia en el siglo XIII, a lo que añadió que “¿Se usa como iglesia hoy día? Sí. ¿Está en la lista de Patrimonio de la Humanidad? Sí. Lo que importa es proteger (un monumento), no si se usa como mezquita o iglesia”.
Ahora son otras instancias internacionales, en este caso el gobernante de uno de los Emirates Árabes Unidos, las que se pronuncian y llevan el debate aún más lejos. En este caso, pidiendo otra reconversión, la de la Mezquita-Catedral de Córdoba en un templo para el culto musulmán.
No es la primera vez que se reclama permitir el rezo musulmán en la Mezquita-Catedral de Córdoba. A finales de 2006, la Junta Islámica de España escribió al Papa de entonces, Benedicto XVI, para que el rezo en el templo cordobés fuera compartido entre cristianos y musulmanes. Por aquel entonces, alegaron que permitir esto supondría la creación de un “espacio ecuménico único”.
Esto, como ya es sabido, nunca llegó a permitirse. Es más, el obispo de Córdoba por aquel entonces, Juan José Asenjo, se opuso a esta petición afirmando que un templo ecuménico “puede tener sentido circunstancialmente en un aeropuerto o en una villa olímpica, puesto que no se trata propiamente de templos sino de lugares de oración, pero no en el caso de una catedral”.
El presidente de la Junta Islámica de España, Mansur Escudero, fue uno de los mayores defensores del uso compartido de la Mezquita hasta su muerte en octubre de 2010. Ese mismo año había escrito al que todavía hoy es obispo de Córdoba, Demetrio Fernández, recién llegado al cargo, para tratar este asunto. Sin embargo, Fernández se opuso incluso más firmemente que su predecesor.
El prelado manifestó que ese uso compartido que se pedía era “un eufemismo” que significaba “católicos, váyanse de aquí”. “La respuesta a la pregunta sobre el uso compartido de la Catedral es que no, que no nos vamos, porque en este lugar la Iglesia Católica lleva 16 siglos, mientras que los musulmanes han estado cuatro siglos y medio”.