Aunque la ley Celaá establece que los centros sostenidos con fondos públicos no pueden separar al alumnado por género, con el objetivo de favorecer la igualdad de derechos y oportunidades, aún quedan 51 colegios que lo hacen
Los colegios que segregan por sexo se han reducido en un 42% en los últimos años, debido en gran parte a la prohibición de separar en aulas financiadas con dinero público –desde la entrada en vigor en 2021 de la llamada ley Celaá– y a que muchos de estos centros han optado por conservar la ayuda y cambiar al régimen mixto.