A medida que el catolicismo retrocede, otros cultos avanzan, como la Iglesia Pentecostal (movimiento cristiano protestante). También aumenta el número de ateos y agnósticos.
Si a lo largo del siglo XX, el 90% de los latinoamericanos se declaraban católicos, ese porcentaje ronda ahora el 69% y deberá seguir disminuyendo.
Brasil es uno de los ejemplos más elocuentes. Se calcula que nueve millones de brasileños han dejado el catolicismo desde 2014, un año después del inicio del pontificado del papa Francisco. En el mismo período, el número de cristianos evangélicos aumentó un 29%.
«La Iglesia Católica perdió millones de fieles en América Latina, principalmente para la Iglesia Pentecostal. Esa fue la principal razón para elegir el primer Papa latinoamericano «, dijo Andrew Chesnut, un experto en religión de la Universidad de Virginia Commonwealth, la agencia EFE .
El experto prevé que Brasil, el país con mayor número de católicos en el mundo, deje de ser de mayoría católica en 2030.
Por el momento, el catolicismo sigue siendo la religión dominante en Brasil. De acuerdo con las estadísticas de la Iglesia Católica, hay 172, 2 millones de brasileños bautizados, un récord mundial.
México ocupa el segundo lugar con 110,9 millones de personas bautizadas, lo que corresponde al 85% de la población.
Globalmente, el catolicismo ha perdido terreno en toda América Latina.
El país menos católico es Uruguay con un 38% de ateos y agnósticos.
«La Iglesia continuará perdiendo fieles e influencia política», estima Andrew Chesnut. El experto considera que el papa argentino aún no ha dado pruebas de conseguir parar este éxodo religioso.
