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En medio del agitado panorama nacional, la serenidad de las islas Baleares se ha visto sacudida por un escándalo que entrelaza fe, confianza y traición. La tranquilidad de Ibiza, más allá de sus conocidas fiestas y turismo, se ha visto eclipsada por las acusaciones hacia Juan Manuel de Souza, un párroco que enfrenta cargos por abusos sexuales a menores.
El Hombre detrás del Hábito
Juan Manuel de Souza, nacido en A Coruña y de 73 años, ha sido un líder reconocido en la comunidad religiosa católica Camino Neocatecumenal, también conocidos como ‘los Kikos’. Su posición le permitió estrechar lazos con muchas familias, abriéndose paso en sus vidas a través de la fe y la confianza.
2005: El Principio de las Acusaciones
La sombra del abuso se asomó por primera vez en 2005. Aprovechando la relación de confianza con una familia, de Souza supuestamente abusó de un niño de 12 años en la casa parroquial. La descripción del episodio es angustiante: el menor, vulnerable, fue abordado con intenciones lascivas por el sacerdote, quien utilizó su posición de poder y confianza para tomar ventaja. Al día siguiente, el joven confesó a sus padres su deseo de no volver a estar cerca del párroco.
2009-2010: Un Caso Continuado
En otra situación, entre 2009 y 2010, otro menor fue presuntamente abusado por de Souza. Esta vez, el niño tenía la ilusión de convertirse en sacerdote, y fue ese deseo el que el párroco aprovechó para invitarlo a la casa parroquial, donde supuestamente ocurrieron los abusos. El acusado no solo violentó al menor, sino que, según acusaciones, también le mostró imágenes de mujeres desnudas.
Las Consecuencias Judiciales
De Souza enfrenta dos juicios por estos casos. Para el primer incidente, se le exige una condena de tres años de prisión, junto con una indemnización de 9.000 euros. En el segundo, la petición es la misma duración de cárcel pero con una indemnización de 20.000 euros.
Más Víctimas Emergen
Tras la revelación de estos casos, otras tres víctimas decidieron denunciar. Aunque para dos de ellas los hechos habían prescrito, una tercera, originaria de Mallorca, presentó su caso al amparo de la reciente ‘ley Rhodes’, la cual modifica los plazos de prescripción.
Un cuarto testimonio surgió, de un hombre que fue presuntamente abusado a los 28 años, en circunstancias de vulnerabilidad económica. Su familia confió en el sacerdote y lo acogió en su casa.
Reflexiones sobre la Fe y la Confianza
El caso de Juan Manuel de Souza nos recuerda la importancia de cuestionar y mantener la vigilancia, incluso en los espacios que consideramos más sagrados. La fe es fundamental en la vida de muchos, pero la confianza ciega puede conducir a situaciones trágicas. Mientras la justicia sigue su curso, es esencial recordar que la responsabilidad recae en todos nosotros para proteger a los más vulnerables y asegurarnos de que aquellos en posiciones de poder no abusen de su estatus.