El Pleno de las Cortes de Aragón ha aprobado una proposición no de ley que insta al Gobierno de la Comunidad a que se dirija al de España para derogar todos los acuerdos con el Estado Vaticano «por otorgar numerosos privilegios a la Conferencia Episcopal española, siendo contrarios al carácter aconfesional del Estado español y la Constitución», así como que la asignatura de Religión no tenga cabida dentro del sistema educativo. La iniciativa, presentada por Podemos y enmendada por CHA, ha sido apoyada por estas dos formaciones, así como por PSOE e IU, mientras que Partido Aragonés y Ciudadanos se han abstenido y el PP ha votado en contra.
En ella, también se señala que la Comunidad autónoma es la competente para fijar el horario de las asignaturas, también en la de Religión, y muestra el apoyo a la decisión tomada por el Gobierno de Aragón sobre la reducción del tiempo designado a esta materia en Primaria, así como el respaldo político al Ejecutivo en «cuantas acciones lleve a cabo para recurrir el auto» del Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad sobre esta cuestión.
Además, la proposición no de ley subraya el derecho de los aragoneses «a tomar sus propias decisiones» de acuerdo con el Estatuto de Autonomía de Aragón y con las competencias transferidas y expresa la «total oposición a que estas decisiones soberanas estén supeditadas al dictado de países extranjeros».
El diputado de Podemos, Carlos Gamarra, ha remarcado que la Constitución española otorga al Estado «un carácter aconfesional», algo que «no se cumple» por los acuerdos con la Santa Sede, que «mantienen incontables privilegios jurídicos, económicos y en la enseñanza» para la Iglesia católica. No obstante, ha explicado que en ellos «no se establecen horarios para la asignatura de Religión», que a su entender no debe impartirse en los colegios para «avanzar hacia una enseñanza laica, científica, moderna e innovadora».
El diputado del PP, Antonio Torres, ha opinado que hay «iniciativas que buscan sumar y otras hacer bloque, ruido», como esta que pretende «confrontar y atacar a la Iglesia católica», cuando no se ha dicho que hay acuerdos con otras confesiones y en Aragón 1.500 alumnos recién clases de Islam y 800 de Religión Evangélica, apoyándose en un «rancio anticlericalismo heredado», si bien ha agradecido que Podemos «muestre al ciudadano cuál es su pensamiento y objetivos».
El diputado del PSOE, Dario Villagrasa, ha opinado que en España «se privilegia a unas confesiones sobre otras» por lo que ha apostado por «reformar la Constitución» y aprobar una ley orgánica de libertad religiosa y de conciencia, donde estén «todas las confesiones en plano de igualdad», para abogar porque la Religión en la escuela «no tenga carácter evaluable y no compute a efectos académicos», algo que ha propuesto a través de una enmienda, que ha sido rechazada.
La diputada del Partido Aragonés, María Herrero, ha pedido «responsabilidad» y ha recordado que la Constitución española habla de «aconfesionalidad, neutralidad, pero también de la cooperación con las confesiones religiosas y la Iglesia católica».
El diputado de Ciudadanos, Ramiro Domínguez, ha apostado por «revisar» más que por derogar los Acuerdos con la Santa Sede, ya que la Iglesia «está en la sociedad y en muchos ámbitos realiza un trabajo importante», si bien «la realidad ha cambiado desde 1979», cuando se suscribieron esos pactos con el Vaticano.
El diputado de CHA, Gregorio Briz, que ha intervenido por el grupo mixto, ha señalado que la reducción del horario de Religión en Primaria en Aragón de 90 a 45 minutos semanales se ha suspendido cautelarmente por un auto del TSJA, una «decisión política tomada conforme a la normativa educativa vigente», para sostener que «no se puede desde las instituciones promocionar la confesionalidad de un Estado».