El Ayuntamiento de l'Alcora se ha convertido en el primero de la provincia en sacar adelante una moción para reclamar a la Iglesia el pago del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI). Lo hizo con los votos favorables del PSPV y el Bloc y el rechazo del PP, que gobierna en minoría.
Sin embargo, la unión mostrada por los grupos de la oposición en este sentido se rompió a la hora de debatir el presupuesto de fiestas. Y es que los socialistas votaron en contra de una moción del Bloc en la que se exigía reducir un 20% dicha partida a través de la eliminación de gastos superfluos, el ajuste de las contrataciones de algunas actividades y la creación de un Consell de Festes.
A los nacionalistas no les sentó nada bien la postura del PSPV, que ayer tildaron de «irresponsable». «Luego, cuando falte dinero para cosas más importantes, lo lamentarán», añadieron desde el Bloc.