El Diario Oficial de Galicia ha publicado este viernes la resolución de incoación para declarar el patrimonio como Bien de Interés Cultural
El Diario Oficial de Galicia ha publicado este viernes la resolución de incoación para declarar como Bien de Interés Cultural (BIC) del patrimonio inmaterial la Ofrenda del Antiguo Reino de Galicia.
Según explican en un comunicado, a la hora de elaborar el expediente -que supone su protección patrimonial inmediata-, los técnicos de la Xunta han tenido en cuenta que se trata de una manifestación «singular» de la comunidad y de una de «las pocas tradiciones vivas que evocan la entidad política histórica de Galicia», según refleja EuropaPress.
La incoación valora también que se mantenga de forma ininterrumpida durante más de tres siglos y medio, «reflejando el carácter de unión del pueblo gallego» y que constituye «un hecho único dentro de las pocas manifestaciones inmateriales vivas».
Anualmente, el domingo siguiente al Corpus Christi tiene lugar en Lugo un acto institucional y religioso en el que participan los mandatarios de las antiguas capitales del Reino de Galicia: A Coruña, Lugo, Ourense, Santiago de Compostela, Mondoñedo, Betanzos y Tui.
Se trata de la ofrenda al Santísimo y su posterior procesión por la ciudad, con la que se cumple con el voto solemne hecho en 1669 -ante las dificultades económicas de la Catedral de Lugo- de dotarla de una renta anual con la que iluminar el Altar Mayor.
Desde 1925 hasta la actualidad, destacan, el rito de la Ofrenda se celebra de la misma manera, en una misa solemne en la que participan por turnos rotatorios anuales los representantes municipales de las siete ciudades.
Además, entre las tradiciones litúrgicas, una banda de gaiteros interpreta la Marcha Solemne del Antiguo Reino de Galicia con gaitas en tres tonalidades y percusión.
En la resolución se recoge que la ofrenda «se adapta a la perfección» a la definición que da la Unesco para la salvaguarda del patrimonio cultural inmaterial «al reflejar un uso o expresión que un grupo de individuos reconoce como parte integrante de su patrimonio cultural, transmitiéndolo de generación en generación, siendo celebrada constantemente por una comunidad, suponiendo una interacción con su historia y difundiendo un sentimiento de identidad y continuidad».