Asóciate
Participa

¿Quieres participar?

Estas son algunas maneras para colaborar con el movimiento laicista:

  1. Difundiendo nuestras campañas.
  2. Asociándote a Europa Laica.
  3. Compartiendo contenido relevante.
  4. Formando parte de la red de observadores.
  5. Colaborando económicamente.
Fundación SVSC

La Fiscalía de Madrid abre diligencias de investigación a la Fundación SVSC Santísima Virgen y San Celedonio

Fuentes internas del Arzobispado de Madrid, informan que la Fundación Santísima Virgen y San Celedonio está siendo investigada por la Fiscalía de Madrid, la cual ha procedido a abrir Diligencias de Investigación.

De hecho, hace unos días, varios miembros del Ministerio Público se presentaron en el domicilio social de dicha fundación y solicitaron al Gerente, Javier Cortezón (socio de Javier Lapastora Tupín) múltiples documentos de diversos departamentos de la fundación, así como inspeccionaron las dependencias de la residencia de mayores que gestiona dicha fundación.

Desconociéndose, por ahora, al igual que con el resto de asuntos de dicha fundación, el objeto de dichas Diligencias Previas; ya que ni el patronato, ni la gerencia de la fundación, ni la Comisión Arzobispal de fundaciones han informado al respecto.

Estas mismas fuentes, nos informan que dentro de la Comisión Arzobispal de fundaciones, presidida por José Cobo (Obispo Auxiliar), ojos y voz de Osoro, y compuesta, entre otros, por Fausto Marín Chiva (diácono permanente y mano derecha de Osoro), José Luis Bravo Duró (ecónomo arzobispal), Javier Lapastora Tupín (miembro del Consejo Económico de la Diócesis, Presidente Delegado de la Fundación El Buen Samaritano, miembro de la Comisión Arzobispal de fundaciones, socio de Javier Cortezón (Gerente de la Fundación Santísima Virgen y San Celedonio), existen grandes divisiones en relación con las actuaciones realizadas por Belda y su forma de proceder, y más en concreto respecto a la permanencia en los patronatos de distintas personas.

En concreto, Cobo, Bravo y Fausto consideran que Pedro Negro no debe ser Presidente Delegado de la Fundación Santísima Virgen y San Celedonio al no ajustarse a los parámetros establecidos por la Comisión Arzobispal de Fundaciones, ya que consideran que, en un momento determinado, que se prevé tendrá lugar, Pedro Negro se les pueda dar la vuelta.

Esta consideración tiene el foco especialmente ante futuras actuaciones que la fundación (Belda) quiere realizar, al haber perdido la confianza del obispo (Pedro Negro no firma nada de lo que no sea conocedor Osoro y tenga la prueba de ello). De esta misma opinión es Alberto Andrés Domínguez. Por el contrario, Javier Belda y Javier Lapastora, son partidarios de mantenerlo en la Presidencia Delegada hasta que se realicen ciertas actuaciones (con la Nebrija) para posteriormente proceder a destituirlo; eso sí, con las actuaciones totalmente ejecutadas y por ende, con la consiguiente responsabilidad a sus espaldas.

Ante estas circunstancias y las desconfianzas generadas con estos acontecimientos y otros de los que hablaremos en próximas ocasiones, según personas muy relevantes dentro del Arzobispado, Pedro Negro ha querido salir del patronato de la FSVSC, pero Belda ha convencido al cardenal, en contra del criterio de Cobo, Fausto y Bravo, de que Pedro Negro es pieza clave en todo lo que se quiere realizar próximamente en la fundación y por ello debe seguir en el patronato. 

A estos efectos, se ha producido recientemente una reunión de la Comisión Arzobispal de Fundaciones, así como un patronato de la Fundación Santísima Virgen y San Celedonio, en las que se ha procedido, entre otras cuestiones y por indicación de Belda, a envolver a Pedro Negro, magnificando su gestión, principalmente durante la pandemia y utilizándole con el objetivo de externalizar la gestión de la residencia de mayores de la FSVSC. Objetivo que lleva defendiendo Pedro Negro varios meses ante las continuadas pérdidas que produce dicha actividad en las cuentas de la fundación, las cuales parecen estar en una situación pésima. Externalización que también es defendida por Osoro, Javier Belda y Javier Lapastora por los motivos que a continuación se exponen:

En primer lugar, por la manía personal que tienen estas tres personas a Julio Lage, al que quieren manchar a toda costa, bien sea por su gestión al frente del Arzobispado, bien sea ante los tribunales de justicia. Basta con conocer lo que Belda y Osoro van diciendo por todos sitios de Lage, o las declaraciones de Lapastora ante el Juzgado de Instrucción nº 28 de Madrid. Según fuentes del arzobispado, Lapastora tendría, desde hace mucho tiempo, cierta celotipia respecto a Julio Lage, ya que muchas de las cuestiones que éste proponía al Obispo, le eran denegadas por indicación de Lage.

Sea como fuere, la realidad es que han procedido a expulsar recientemente a la Fundación Aliados por la Integración (antiguo Grupo Norte) de la FSVSC por el motivo real de que esta empresa entró por indicación de Julio Lage, adornándolo con otra serie de motivos. Pero no sólo han expulsado sin razón a la Fundación Aliados por la Integración, sino que lo han realizado injustamente, pues dicha fundación les ha realizado múltiples favores, tanto a la FSVSC como al Arzobispado ante solicitudes concretas de Osoro. Pero a mayor, han dejado a dicha fundación una deuda de unos 90.000 €, aproximadamente. Esto es lo que se dice y comenta a diario por los pasillos del Arzobispado. 

En segundo lugar, Belda quiere que el patronato de la FSVSC ratifique los acuerdos “oscuros” entre el Cardenal y la Nebrija con el objetivo de recuperar la finca de Condes del Val. Acuerdos de los que se desconoce todo y que, antes o después, tendrán que ser fiscalizados, ya que el Cardenal no puede disponer de unos activos de una fundación civil con la intención de que luego esta venga y los ratifique.

No es tan sencillo y tan claro, como no lo es tampoco la situación legal que actualmente tiene el patronato y por ende, los acuerdos que ha adoptado desde mayo de 2020 hasta la actualidad. Según fuentes consultadas por Infovaticana, ya que se están analizando distintas acciones judiciales respecto a la constitución y composición del actual patronato, así como respecto a todos y cada uno de los actos adoptados por el mismo, incluido todo lo referente a las relaciones y acuerdos con la Nebrija en relación al patrimonio fundacional, respecto a su validez y legalidad, pudiendo ser revisados por los tribunales de justicia con las consiguientes responsabilidades personales. Aunque Belda les dice a los patronos, al Cardenal y a la Comisión Arzobispal de Fundaciones que los feligreses de San Jorge no pintan nada en todo esto y por lo tanto, nada tienen que decir y mucho menos que pedir y que por lo tanto lo único que tiene que hacer el patronato es ratificar los acuerdos alcanzados entre el Cardenal y la Nebrija.

Por otra parte otro de los temas que tiene dividido a los miembros del patronato de la FSVSC como al arzobispado, es el asunto del edificio de Buitrago de Lozoya propiedad de la fundación y dedicado a fines diocesanos (catequesis, etc…) por petición y defensa del Vicario de zona, Juan Carlos Vera, el cual es miembro del patronato a disgusto de varios de sus miembros, ya que parece ser, que no es lo dócil que se requiere para ciertas cuestiones.

Pedro Negro, en contra de lo defendido y postulado por Juan Carlos Vera, considera que dicho inmueble debe venderse para conseguir liquidez con la que compensar todas las pérdidas que la Fundación tiene con la gestión de la residencia de mayores y con los pagos a Belda y compañía. Mientras que Vera quiere potenciar los fines diocesanos, al haber ya invertido la fundación más de 500.000 € en acondicionar dichos locales, que actualmente usa el párroco de Buitrago de Lozoya.

Esta situación, junto con otras cuestiones, hace que Juan Carlos Vera sea considerado un patrono no alineado con las directrices del Obispo (Belda, Lapastora, etc…) y por ello se quiera su salida del patronato. No obstante, en la estrategia definida por el Obispo, también se necesita de Juan Carlos Vera para que ante cualquier actuación judicial en la que tuviese que declarar, defendiera la postura de que se le ha engañado en todo la realizado con anterioridad y pueda disparar hacia arriba e imputar a todos los intervinientes. Por lo tanto, Vera se encuentra en una situación un tanto incómoda, al encontrarse querido y odiado a la vez.

Total
0
Shares
Artículos relacionados
Total
0
Share