Hace ya seis años desde que un ciudadano alemán conocido como “Dr. Nittmann” denunció que “el gobierno alemán recaudaba de manera forzosa de su exiguo subsidio de desempleo (…) e impuesto eclesiástico, y esto a pesar de hacer más de 20 años de que el Dr. Nittmann se diera de baja de la iglesia”, según cuenta la web de la Bund gegen Anpassung (Alianza contra el conformismo).
Recogida de firmas
Tras celebrarse el pasado fin de semana el I Concilio Ateo en Toledo, esta organización ha decidido relanzar su campaña de protesta en nuestro país, apoyados por la FIdA. La iniciativa surgida del Concilio se concreta, según informa la federación, en una campaña de recogida de firmas a través de internet.
"No a los impuestos eclesiásticos"
Con esta iniciativa pretenden decir “no a los impuestos eclesiásticos recaudados a personas que no son miembros de las iglesias, bajo cualquier etiqueta, pretexto o disfraz jurídico que sea”.
Desde los años 30
Según informó la federación a través de un comunicado, los firmantes condenan “la recaudación forzosa del impuesto eclesiástico precitada durante 30 años por la República Federal de Alemania sobre la base del informe del Concordato de Hitler de 1933 a desempleados sin confesión”. Este Concordato, sorprendentemente, continú vigente hasta 2005 y, según las críticas de la Bund gegen Anpassung, “hasta la fecha todavía no le ha sido devuelto a ninguna de las víctimas un solo céntimo del dinero saqueado”.
Cartas al Consejo de Europa
La FIdA sugiere además que se envíen cartas por correo postal al Consejo de Europa para reiterar el apoyo a esta demanda y pedir al Tribunal Europeo de Derechos Humanos que imponga a Alemania “el respeto de los derechos humanos en el ámbito de la religión” y la “indemnización” de quienes han tenido que pagar el mencionado impuesto.