El convenio de restauración de iglesias llega a seis templos este año. Avellaneda, Aldehuela, Frechilla, Morcuera, Quintanas Rubias y Rabanera, las beneficiarias
La firma del nuevo convenio para la recuperación y rehabilitación de iglesias y templos en la provincia permitirá llegar este año a seis edificios, una cifra de las más elevadas desde que se pusiese en marcha esta medida hace ya 19 años. Ayer, el presidente de la Diputación, Antonio Pardo, y el Obispo de la Diócesis de Osma-Soria, Gerardo Melgar, suscribieron el acuerdo que dota a estas intervenciones con 333.333,33 euros.
Esta nueva convocatoria permitirá realizar reformas y consolidaciones en las iglesias en Alcubilla de Avellaneda (34.315,94 euros), Aldehuela de Periáñez ((34.315,04 euros), Frechilla de Almazán (47.627 euros), Morcuera (48.394 euros), Quintanas Rubias de Arriba (41.953 euros) y Rabanera del Campo (86.702 euros). Según apuntó el prelado, el convenio engloba sólo «obras estructurales, no de adorno», para poder mantener en pie y con ciertas condiciones de seguridad las edificaciones.
Pardo, quien recordó que «la Junta de Castilla y León ha dejado de participar» en este acuerdo, recordó que esta sintonía con el Obispado «ha supuesto la intervención en 18 iglesias en esta legislatura». Desde 1996 se han invertido «algo más de ocho millones de euros», habiendo aportado la Diputación cerca de dos millones, lo que ha permitido llegar a un centenar de templos en la provincia.
Del total, la institución provincial aporta en este ejercicio 100.000 euros, el Obispado 150.000 y las parroquias beneficiarias los 83.333,33 euros restantes. «Este año nos ha permitido asumir alguna iglesia más por no tener cantidades excesivas» entre los proyectos aprobados. Aunque finalmente se eligieron seis -varios en una segunda fase- habían concurrido 12.
Ninguna de las iglesias seleccionadas cuenta con la declaración de Bien de Interés Cultural. Por otro lado, el vicario de Patrimonio, Juan Carlos Atienza, apuntó que hay unos 800 templos en uso en la provincia y «van surgiendo problemas constantemente», si bien el Obispado ayuda frente a complicaciones menores con unas «60 ó 70 intervenciones al año». En lo tocante al deterioro de la colegiata de Medinaceli, anunció que se está «trabajando a través de la Consejería o del ‘1% Cultural’ para solucionar el deterioro, concentrado «en parte de la torre y en parte en el interior» del emblemático templo.