EQUO Granada documenta el grave deterioro del inmueble, declarado BIC y que perdió su carácter público hace tres años tras ser cedido gratis por la Diputación a la Orden religiosa con el compromiso de su rehabilitación.
El deterioro del Hospital de San Juan de Dios avanza a un ritmo alarmante a punto de cumplirse tres años desde que saliera del patrimonio público para regresar a manos de la Orden que le da nombre. El hospital, que se asentó sobre un edificio renacentista -su bello claustro herido ahora por la falta de conservación data del siglo siglo XVI- fue entregado gratis por la Diputación de Granada en mayo de 2015, con Sebastián Pérez como presidente de la Diputación. El PP completó entonces un proceso que se había iniciado en 2005, con el socialista Antonio Martínez Caler al frente del gobierno provincial, y que se ejecutó por fases.
La controverrtida medida adoptada por la Diputación partía de la imposibilidad de rehabilitar el inmueble ante el elevado coste de las obras. La Orden religiosa defendió desde entonces que contaría con suficientes recursos para acometer la imprescindible remodelación, gracias a las aportaciones de sus fieles y devtos. Sin embargo, hasta el momento tan solo se han acometido timidas reformas de rehabilitación.
La cesión se formalizó en abril de 2015, con el PP al frente de la Diputación. www.sjdgranada.es
Denuncia de EQUO
El Hospital de San Juan de Dios es una hermosa joya situada en el corazón de Granada, asentóada en un edificio renacentista, que se reformó y amplió en los siglos XVII y XVIII para su uso actual.
Según la información recogida en la base de datos del Instituto Andaluz de Patrimonio Histórico, la portada, del año 1609, está formada a base de mármoles de Sierra Elvira y Macael. Su arco de medio punto está flanqueado por cuatro columnas dóricas. El resto de la fachada, originariamente de ladrillo visto, está oculta por un revestimiento moderno.
En la entrada, el techo del zaguán es de artesones cuadrados con labores renacentistas.
El claustro renacentista, siglo XVI, dispone en todo su contorno de arquerías semicirculares alzadas sobre columnas dóricas. También existen pinturas al temple y al óleo y decoración barroca en los arcos. El zócalo tiene ornamentación barroca de azulejería, con piezas sevillanas y valencianas.En su piso principal se encuentra el oratorio, de planta rectangular dividida en dos partes por una arquería, con bóvedas de yesería y techumbre de madera.
Entre otras estancias, del claustro primero sólo se conservan los techos de madera y algunas yeserías.
La iglesia es de una sola nave, con planta de cruz latina, con dos capillas abiertas en sus muros, a las que anteceden arcos semicirculares, alta cúpula en el crucero y coro a los pies.La cúpula se eleva sobre ocho arcos. Se distingue el anillo, cuerpo de luces y la cúpula propiamente. El coro a los pies sobre arco escarzano, con bóveda vaída y barandilla de celosía, a cuyos lados hay dos grandes tribunas, cosa que se repite en la nave hasta la Capilla Mayor.
La fachada de la iglesia posee dos cuerpos entre torres coronadas por cahpiteles. En el bajo arco de medio punto entre columnas que flanquean nichos con estatuas de ángeles. Sobre él, en hornacina, la imagen del santo, y a los lados relieves de motivo religioso. La planta es de cruz latina, con capillas laterales en la nave. La sacristía se ubica tras el presbiterio y, sobre ella el camarín conteniendo los restos de San Juan de Dios. Los muros se muestran apilastrado con entablamento corrido. Hay una tribuna a cada lado del presbiterio. Todas las foros que documentan el deterioro del edificio pertenecen a EQUO GRANADA.