En las vísperas de Navidad, la Diputación Provincial de Almería ha inaugurado un belén que representa lo que ya es tradición en Almería, además, se convierte en uno de los focos de las actividades para este final de año. Esta representación es de la Familia Miras.
En la inauguración que pone en marcha la Navidad 2019 en el Palacio Provincial han participado Javier A. García, presidente de la Diputación; Adolfo González, obispo de Almería; David Colomera, hermano mayor de la Hermandad de las Angustias; y José Miras, representante de la familia propietaria del belén.
Esta tradicional exposición navideña pone en valor la fe cristiana y la tradición de la provincia en numerosos siglos. Como ha definido el presidente de Diputación un Belén que representa el “sentido de la navidad y la gratitud” junto al “símbolo de Jesucristo, la paz y solución”.
No era para menos, por eso González ha bendecido esta representación del nacimiento de Jesucristo, para después ver detalladamente cada rincón de la exposición.
El nacimiento de la familia Miras presenta este año varias novedades. Su superficie útil es de 94 metros cuadrados, está compuesto por más de 600 piezas, entre figuras, casas, motores, animales, entre otras, con la incorporación 25 figuras nuevas, una de ellas la de una mujer que porta un cántaro, en una tradicional estampa que evoca a Mojácar. Dispone de 139 puntos de luz, 106 motores entre casas y figuras, de las que 58 tienen movimiento.
En esta jornada ‘prenavideña’, ha actuado el Coro del Colegio de la Compañía de María interpretando dos villancicos, y así llenando el Patio de Luces de la Diputación de ambiente navideño.
En este acto de festividad, el obispo de Almería se ha mostrado preocupado por la “situación de la natalidad”, ya que el reciente estudio del Instituto Nacional de Estadística (INE), el año 2018 ha registrado el peor resultado en nacimientos en los últimos 20 años con 372.777 niños. Por eso, González ha dado importancia a la “procreación”, para poder “transmitir la vida colaborando con el procreador”, y con ello, que “la soledad de los que viven” no siga avanzando.