La iglesia de Tronchón acogió este jueves por la tarde la presentación de la restauración de un excepcional banco barroco del siglo XVIII que ha sido recuperado por la Fundación Santa María de Albarracín gracias a la financiación de la Comarca del Maestrazgo. El mueble cuenta con la particularidad de ser una pieza única y de ser más típica de una casa palaciega que de un templo litúrgico.
El objetivo de la restauración de este peculiar banco ha sido contribuir a la salvaguarda y conservación del patrimonio histórico y cultural de Tronchón. «Lo cierto es que es la pieza de mobiliario más culta, y de más calidad, de toda la comarca. El mueble es más típico del entorno de la corte que de una iglesia», destacó Sonia Sánchez, técnico de Patrimonio Cultural del Maestrazgo.
La restauración realizada por la Fundación Santa María de Albarracín ha consistido en tratar el mueble contra los insectos que amenazaban la estructura y recuperar algunos detalles de las tallas decorativas, formadas por varias «figuras fantásticas». «Por suerte el mueble no estaba muy dañado y se ha podido recuperar en su totalidad. Ahora ha recuperado su esplendor original y no se ha tenido que inventar nada…», comentó Sánchez.