Izquierda Abierta, corriente interna de Izquierda Unida, pide a través de un comunicado a los grupos municipales del Ayuntamiento de León que presenten una moción laicista «que permita separar Iglesia e institución».
León sería, de aprobarla, el segundo municipio de la provincia tras Cacabelos, recuerda la corriente de IU. Ateniéndose a lo que establece la actual Constitución española, de que «ninguna confesión tendrá carácter estatal», el Ayuntamiento de León debería tener como objetivo democrático «fomentar la libertad de conciencia y la independencia de esta institución del Estado de cualquier confesión religiosa o ideología particular, por respeto a la pluralidad ideología, de convicciones y creencias del conjunto de la ciudadanía de este municipio», recuerda la nota.
De ser así, los miembros de la Corporación y el personal al servicio de la administración municipal no deberían mostrar, en el ejercicio de su cargo o de sus funciones, ningún gesto de sumisión o veneración de personas o imágenes religiosas, ni participarán en función de su cargo en dichas manifestaciones religiosas, y el Ayuntamiento y su corporación tampoco se deberían encomendar «al santoral, imágenes o rituales religiosos».