Teólogos y médicos critican la posición del arzobispo emérito de Pamplona // El Viernes Santo negó en Valladolid la necesidad de aplicar cuidados paliativos
El arzobispo emérito de Pamplona volvió a ocupar el centro de la polémica con el Sermón de las Siete Palabras que pronunció el pasado vienes en Valladolid. Fernando Sebastián disparó durante 80 minutos mensajes contra la eutanasia, los cuidados paliativos y el laicismo.
El prelado aseguró que los cristianos se deben enfrentar a la muerte asumiendo el dolor sin miedo, confiando en Dios. Puso el ejemplo de Jesucristo, que “no tuvo cuidados paliativos” y sí una muerte “absolutamente digna”. Sebastián lamentó que “algunos” confundan la dignidad de la muerte con el miedo al dolor. En su sermón obvió que Jesús no estaba enfermo, sino condenado a muerte. Y que en el año 33 no existían los cuidados paliativos.
“Antievangélico”
El sermón provocó la indignación de destacados teólogos. Enrique Miret Magdalena recordó ayer a Sebastián que el Papa Pío XII defendió los cuidados paliativos para llegar a la muerte digna, informa Servimedia. Según Magdalena, la muerte de Jesús “no es un ejemplo para que nosotros hagamos lo mismo. Tenemos que aceptar los males que nos vengan excepto el dolor por el dolor”, aseguró. El teológo Juan José Tamayo lo tachó de “antievangélico”. A su juicio, las declaraciones de Sebastián “revelan la actitud integrista de la Iglesia católica, que no tiene ninguna sensibilidad”.
El presidente de la Sociedad Española de Cuidados Paliativos, Xavier Gómez, recordó que “los paliativos alivian el sufrimiento y mejoran la calidad de vida del paciente y sus familiares”. Gómez expresó que “la dignidad es algo personal” y dijo no comprender “que se niegue la posibilidad de paliativos”. Desde la Asociación Derecho a Morir Dignamente, su presidente, Salvador Pániker, tachó el sermón de “grotesco y anacrónico”, y aseguró que va en contra de la actuación de Jesús, que curaba a los enfermos.
El discurso de Sebastián está muy ligado a la actualidad. El miércoles pasado, la maestra francesa Chantal Sébire apareció muerta en su domicilio, después de que la Justicia francesa le denegara aplicarle la eutanasia.
También está fresca en la memoria la sentencia que el pasado mes de enero determinó que los médicos de Urgencias del Hospital Severo Ochoa de Leganés aplicaron correctamente las sedaciones a los pacientes en estado terminal. El arzobispo emérito Sebastián confundió en su sermón cuidados paliativos con eutanasia, como los grupos ultracatólicos que lideraron la campaña contra los médicos del Severo Ochoa. Los cuidados paliativos no provocan la muerte, sólo evitan que sea dolorosa cuando ésta sea inevitable e inminente.
Un prelado polémico
También hace un año las críticas cayeron en cascada cuando el prelado aseguró en una conferencia que partidos como Falange Española de las JONS son “dignos de consideración y apoyo”. En ese mismo discurso, aseguró que la “creciente marginación de la Iglesia fue una de las causas profundas si no del levantamiento de julio del 36, sí de la reacción popular y de la dureza de la Guerra Civil”. Además, afirmó que la Iglesia aceptó el franquismo “como refugio de la dura persecución sufrida”.
Sermón ‘ansiado’
El responsable de la Cofradía de las Siete Palabras de Valladolid, Juan Pablo Ruiz Alejos, aseguró que eligieron a Sebastián para su sermón “porque es una persona que tiene mucha facilidad de palabra”, informa Daniel Ayllón.
“Llevábamos varios años intentando traerle a Valladolid para que diera el sermón, pero no ha podido ser hasta éste porque, como arzobispo de Pamplona, tenía que atender a sus fieles en Navarra”, explicó ayer Ruiz Alejos. También defendió “la libertad de oración” que su organización da a los ponentes todos los años.