Un reportaje de AP revela la intención de políticos para romper el secreto de confesión ante delitos como abusos sexuales a menores y cómo la iglesia ha defendido este trato para garantizar su trabajo y parte en la fe de las personas.
Salt Lake City, Utah. Según un reportaje de AP, en el Centro Católico Newman de Salt Lake City un sacerdote advirtió a los feligreses que el secreto de confesión corría peligro, esto ocurrió en el 2020.
Una nueva ley acabaría con ese vínculo sagrado, dijo el cura, quien pidió a los fieles que firmasen una carta al salir del templo.
“Yo/Nosotros nos oponemos a la HB90”, decía la carta obtenida por AP. “HB90 es una interferencia inapropiada del gobierno en la práctica de la religión en Utah”.
Leyes eximen a los religiosos de informar los abusos de menores si se enteran durante una confesión
A pocos días de ese mes de febrero del 2020, la diócesis católica de Utah, que supervisa decenas de iglesias, dice que reunió unas 9.000 cartas firmadas.
Se las hizo llegar a la representante estatal Ángela Romero, una demócrata que preparaba un proyecto de ley sobre el abuso sexual de menores.
Decían que la HB90 le apuntaba al “privilegio de las comunicaciones entre clero y penitentes”.
Era una ley similar a las vigentes en muchos estados que eximen a los religiosos de informar los abusos de menores si se enteran de ellos durante una confesión.
La HB90 no tenía la menor posibilidad de ser aprobada
Los líderes católicos de Utah se movilizaron contra la HB90, aduciendo que ponía en peligro la sagrada privacidad de las confesiones.
El proyecto fue rechazado asimismo por algunos miembros de la Iglesia de Jesucristo de los Últimos Santos, conocida como la iglesia mormona, a la que pertenecen la mayoría de los legisladores estatales.
En 33 estados, el clero, al igual que maestros, médicos y psicoterapeutas, está exento de denunciar presuntos abusos sexuales de menores si la iglesia considera que es información privilegiada.
“Creen que tienen una misión divina, que justifica mantener limpios el nombre y la reputación de sus instituciones”
En muchos de estos casos, se invoca el secreto de confesión para proteger a las organizaciones religiosas de demandas civiles y penales si las autoridades civiles se enteran del abuso.
En las dos últimas décadas, legisladores estatales como Romero han propuesto más de 130 proyectos de ley que buscaban crear o enmendar las leyes relacionadas con la denuncia de los abusos sexuales de menores, según un estudio de AP.
En otros estados, incluidos California, Missouri y Nuevo México, una intensa oposición a estas medidas de las iglesias católica y mormona frustró también las reformas.
“Creen que tienen una misión divina, que justifica mantener limpios el nombre y la reputación de sus instituciones”, expresó David Finkelhor, Director del Centro de Investigaciones de Delitos Contra Menores de la Universidad de New Hampshire a AP.
Legislador de Utah, había recomendado a un obispo que no acudiese a las autoridades civiles a denunciar
La investigación de AP comprobó el mes pasado que un obispo mormón de Arizona, siguiendo instrucciones de los líderes de esa iglesia.
Se abstuvo de denunciar a un miembro de la congregación que había confesado haber abusado sexualmente de su hija de cinco años.
AP reveló que el representante Merrill Nelson, abogado de la iglesia y legislador republicano de Utah, había recomendado al obispo que no acudiese a las autoridades civiles.
Porque el clero de Arizona estaba protegido por las leyes que regulan su relación con los penitentes, según documentos judiciales.
Esto permitió que el miembro de la iglesia Paul Adams, hoy fallecido, siguiese violando a sus dos hijas y abusando de uno de sus cuatro hijos por años.
“Se está permitiendo a la iglesia proteger a predadores sin importarles los chicos»
La senadora estatal Victoria Steele, demócrata de Tucson, dice que, en respuesta a este caso, tres veces presentó proyectos de ley eliminando el privilegio en torno a las relaciones clero-penitente.
Y que legisladores mormones impidieron que fuese considerado por la legislatura.
“Se está permitiendo a la iglesia proteger a predadores sin importarles los chicos», comentó Steele a AP
«Usan todo lo que esté a su alcance para impedir que este proyecto sea considerado”.
Hay más casos como el de Adams, en el que se invocan los privilegios del clero cuando la reticencia a denunciar abusos permite que los abusos continúen.
«Un miembro que confiesa haber abusado sexualmente de menores viene en busca de una oportunidad»
En el 2013, un expolicía de Boise en Idaho se entregó a las autoridades y confesó haber abusado de menores.
La iglesia mormona dijo en un comunicado escrito enviado a AP que un miembro que confiesa haber abusado sexualmente de menores “viene en busca de una oportunidad de reconciliarse con Dios y pide perdón por sus acciones».
«Esa confesión es considerada sagrada y, en la mayoría de los estados, es vista como una conversación religiosa protegida”.
“Sin la garantía del secreto, la gente conflictuada no confiará en el clero”
La Conferencia de Obispos Católicos de Estados Unidos no respondió de inmediato a pedidos de comentarios sobre sus campañas contra los proyectos de ley que buscan eliminar el privilegio de las comunicaciones clero-penitente.
“Se considera esencial para el ejercicio de la religión que haya un privilegio clero-penitente que permita a la gente acercarse a los sacerdotes para aliviar su carga», manifestó Merrill Nelson, el representante estatal de Utah a AP.
“Sin la garantía del secreto, la gente conflictuada no confiará en el clero”.
La representante estatal Ángela Romero dice que recibió llamadas e emails con amenazas.
“Decían que yo estaba atacando la Iglesia Católica y que quería acabar con la confesión, uno de nuestros sacramentos”, resalta el reportaje de AP.
Al momento de publicar esta nota, Univision 32 esperaba la opinión escrita por parte de representantes de la Iglesia de Jesucristo en Utah, al igual que la posición de Diócesis Católica de Salt Lake City.
En caso de recibir una respuesta por parte de alguna de las instituciones religiosas o de sus representantes, la anexaremos a esta nota como parte de nuestro ejercicio periodístico.