Descargo de responsabilidad
Esta publicación expresa la posición de su autor o del medio del que la recolectamos, sin que suponga que el Observatorio del Laicismo o Europa Laica compartan lo expresado en la misma. Europa Laica expresa sus posiciones a través de sus:
El Observatorio recoge toda la documentación que detecta relacionada con el laicismo, independientemente de la posición o puntos de vista que refleje. Es parte de nuestra labor observar todos los debates y lo que se defiende por las diferentes partes que intervengan en los mismos.
Desde la Revolución Liberal de 1871, Guatemala es un país laico, es decir sin religión oficial, con libertad de cultos, lo cual está plasmado en la Constitución. La razón es simple: las ideas políticas y las religiosas no necesariamente coinciden y los feligreses pueden pertenecer, tener ideas políticas distintas y hasta contradictorias. Hace poco, 18 diputados —entre ellos la presidenta del Congreso, Shirley Rivera— firmaron la iniciativa de ley 5915, para pedir la libertad de religión, o sea una ley para dar un derecho ya existente en la Carta Magna. Han seguido los intentos de atrasar al país al mezclar religión con política, y al mezclar liturgias de distintas religiones. No puede caber en la cabeza.