La Comisión de Educación del Parlament de les Illes Balears ha aprobado este jueves una iniciativa liderada por Unidas Podemos, y firmada también por los partidos del Pacte, para «caminar hacia la laicidad en la enseñanza pública». La ibicenca Gloria Santiago, impulsora de la iniciativa, vicepresidenta del Parlament y diputada de Unidas Podemos, ha apuntado que «retirar la religión de las aulas es avanzar en democracia, es necesario fomentar el pensamiento crítico. Lo público, en lo público, y lo privado, que se quede en lo privado».
La diputada ha señalado la «incongruencia» del Partido Socialista, que ha apoyado la iniciativa como firmante pero que «votó en contra, junto a Més per Mallorca, de la enmienda que presentó Unidas Podemos a la Ley de Educación para eliminar las referencias a la religión en las escuelas públicas», denuncia la formación morada en una nota de prensa. Santiago ha sido crítica con su postura en la Comisión: «Tienen algo en común con el PP, y es que ninguno de los dos votó a favor de nuestra enmienda para eliminar la religión de la Ley de Educación, ahí sí que se ponen de acuerdo».
«Tenemos que asumir nuevos retos como comunidad autónoma y como país, que mejoren la idea de democracia. Mientras el Estado siga abrazando a la Iglesia y las religiones, no habrá democracia plena. Los acuerdos del Estado español con la Santa Sede en 1979 ponen en duda esa famosa aconfesionalidad formal que está a su vez promulgada en la Constitución», ha señalado la diputada. «Estos acuerdos otorgaron a la Iglesia Católica numerosos beneficios y una gran influencia en el ámbito educativo«, ha explicado Santiago, quien ha señalado además que «laicidad implica igualdad de derechos y eso precisamente impide cualquier privilegio según las convicciones personales«.
«Las convicciones de conciencia religiosas, agnósticas, o ateas son un ejercicio de la libertad individual y por tanto forman parte del ámbito privado de las personas. Este país merece libertad en las aulas. Iglesia y colegio deben separarse», ha enfatizado Santiago. Por otro lado, la vicepresidenta del Parlament ha afirmado que «la escuela tiene que ser un espacio laico donde se desarrolle el pensamiento, la creatividad y el espíritu crítico en libertad». «La coherencia de una democracia exige un compromiso firme con la laicidad del Estado, no hay otro camino», ha reiterado.
Mediante esta Proposición No de Ley, se pide al Gobierno del Estado que deje sin efecto los acuerdos con la Iglesia Católica y eliminar de las escuelas sostenidas con fondos públicos la enseñanza de las religiones. Además, se insta al Gobierno del Estado a modificar la legislación y los acuerdos vigentes como los del 3 de enero de 1979 con la Iglesia Católica, la ley 24/1992, de 10 de noviembre, con las iglesias evangélicas; la ley 25/1992, de 10 de noviembre, por la que se aprueba el acuerdo de cooperación del Estado con la Federación de Comunidades Israelitas de España y la ley 26/1992, de 10 de noviembre, de cooperación del Estado con la comisión islámica de España.