En Gipuzkoa cerca de una decena de municipios tienen espacios públicos para organizar estas celebraciones
Los funerales civiles se están convirtiendo cada vez más en una alternativa a los oficios religiosos tradicionales.Un funeral laico o civil es una celebración, en un espacio público, centrada en la vida del fallecido. Una ceremonia donde se recuerda su personalidad, sus recuerdos, las anécdotas de su vida.
Cada vez son más los municipios que preparan espacios públicos y gratuitos para estas despedidas y aunque cada vez tiene más adeptos ,bien por desconocimiento o bien porque el funeral religioso todavía está muy arraigado en la sociedad, todavía son pocos los funerales civiles que se hacen en Gipuzkoa.
Localidades como Éibar, que desde el año 2000 dispone de un templete para estas despedidas ,Irún ,Errenteria o Donostia cuentan ya con estos lugares. En el caso de la capital guipuzcoana, el lugar elegido es el parque de Cristina Enea, aunque desde que se puso en marcha este servicio en el año 2019 apenas se han celebrado una docena de funerales civiles y es que esta otra forma de decir adiós a la persona querida no acaba de «cuajar» en la sociedad.
En Bergara, el ayuntamiento está transformando el antiguo edificio de las caballerizas, situado en la zona del palacio Errekalde, en un recinto para estas celebraciones. Un proyecto que se espera este finalizado en 5 meses.
Los funerales civiles o laicos son celebraciones flexibles en las que se puede hacer todo aquello que se le ocurra a la familia o amigos. Unas despedidas que se celebran cuando el duelo está más reposado, y la tristeza deja paso a la emoción, en un acto de recuerdo a todo lo compartido con la persona fallecida
