«Lo que hice, crucificar a un pastor cristiano hasta la muerte, fue un mandamiento para librar a Israel del mal».
Adam Sheafe, un fanático mesiánico sionista estadounidense, asesinó a un pastor cristiano en Arizona. crucificándole y colocándole una corona de espinas en la cabeza, en un plan según afirma, para «librar a Israel del mal».
Este criminal, quien tiene un tatuaje hebreo en el cuello, como todos los sionistas, basan sus delirios en el antiguo testamento, confesó haber planeado la crucifixión de 14 líderes cristianos en 10 estados por toda EEUU en lo que llamó «Operación Primer Mandamiento», según él una misión divina para acabar con los idólatras (cristianos) que comulgan con el nuevo testamento.
Solo imaginen la que se liaría ahora si un musulmán hubiese crucificado en EEUU a un cristiano, sería noticia en todo el mundo… pero el fanatismo sionista no existe para los medios y estos criminales que están matando niños en Gaza todos los dias en nombre del supremacismo, no representan ningún peligro.
