El Gobierno de España, sólo por trasnochada tradición y sin que ninguna ley le obligue, ha vuelto a conceder indultos extraordinarios a personas presas (seis), a petición de distintas hermandades y cofradías católicas.
Estos indultos religiosos vulneran al menos dos principios democráticos y constitucionales: la aconfesionalidad del Estado (neutralidad religiosa), y el principio de igualdad entre personas sin distinción de religión.
El Gobierno de España proporciona protagonistas para ritos religiosos de Semana Santa. Las distintas cofradías compiten por tener “su preso” (da caché). Se suele anunciar y organizar un espectáculo especial para hacer que la procesión destaque sobre las demás.
Para obtener el indulto los reclusos han tenido que ser propuestos por las cofradías, tras comprometerse a protagonizar la procesión, discriminando, claramente, a presos no católicos. También, es buen incentivo para que los capellanes de prisiones puedan aumentar su número de fieles esperando una futura recompensa.
En fin, un verdadero disparate democrático para contentar a lobbies ultraconservadores. Avergüenza que prácticas que parecen del medievo permanezcan en la sociedad del siglo XXI que se dice igualitaria y aconfesional… gobernada, además, por una coalición “progresista”.
Desde Europa Laica exigimos al Gobierno de España que cumpla con la aconfesionalidad y la igualdad que contempla nuestra carta magna, se cancelen los acuerdos Iglesia-Estado y se dejen de conceder privilegios a una confesión religiosa que discrimina y segrega a la población reclusa y a toda la ciudadanía.