La asociación pedirá que el Gobierno de Asturias haga una declaración de Santa María del Naranco como Bien de Dominio Público.
«Reconocer solo dos cementerios inmatriculados de forma errónea es ridículo y, por supuesto, no nos lo creemos». Es la valoración que hace José María Rosell, portavoz del Grupo Inmatriculaciones Asturias, del resultado que ha arrojado en Asturias la revisión de los bienes de la Iglesia cuya titularidad habrían registrado de forma indebida entre 1998 y 2015. Tras años de reivindicaciones para que se aclarara una supuestas inmatriculación masiva llevada a cabo en España, la Conferencia Episcopal presentaba el lunes su informe de revisión, coincidiendo con una visita oficial de Pedro Sánchez.
Según dicho informe, de los más de 34.000 bienes revisados, la Iglesia admite que hubo error en la titularidad de casi un millar. En Asturias habría bastante certeza del registro indebido de dos cementerios rurales, los de Godán y Rañeces «ya que al haber estado siempre gestionadas por la parroquia se inmatricularon», explican desde el arzobispado. Y quedaría sin resolver la situación de otros 15 bienes que fue imposible su localización por la vaguedad de los datos para su comprobación.
Los impulsores en Asturias de esta investigación, que pertenecen a Recuperando, la coordinadora estatal para la recuperación de este patrimonio, consideran que pese al escaso rédito logrado, el informe de la Conferencia Episcopal sí que incluye algunos puntos importantes. «El primero es que hay un reconocimiento público de que hicieron cosas mal, y eso ya es nuevo; lo segundo, que entre algunos bienes sobre los que sí reconocen error hay iglesias y capillas, lo que implica darnos la razón de que por el hecho de que un edificio sea una iglesia no lleva implícito que sea de la Iglesia. Una cosa son los usos para liturgia y otra muy distinta la propiedad», ahondó Rosell.
Santa María del Naranco, Bien Público
Para Rosell y el grupo asturiano, la Diócesis de Oviedo no aclara nada, o muy poco, sobre qué ocurre con los edificios del prerrománico y eso hace que vayan a poner en marcha una petición inmediata para que el Gobierno de Asturias declare Santa María del Naranco como Bien de Dominio Público, «para que nunca pueda tener una titularidad particular».
«Al principio creímos que la Iglesia había inmatriculado todo el prerrománico. Pero luego ya supimos que no. Al menos sabemos que nadie ha conseguido tener la nota registral de Santa María del Naranco. Por eso mismo será el primer bien para el que pidamos de forma urgente que haya esa declaración. Para nosotros es un ejemplo claro de un edificio construido por la monarquía asturiana para sus menesteres, que aunque tuvo en algún momento usos litúrgicos, incluso fue restaurado con dinero público», indicó Rosell.
Para el colectivo que reclama que se revisen los bienes de los que la Iglesia se habría apropiado de una forma irregular, lo sucedido el lunes es una manera de evidenciar que «la Iglesia y el Gobierno han pactado un apaño para legalizar miles de inmuebles» y seguirán insistiendo en que la lista de bienes inmatriculados tiene que incluir no solo a los que se registraron entre 1998 y 2015 -con la reforma de la Ley Hipotecaria- sino «todos los registrados desde 1978 en los que solo se presentó como justificación la firma del obispo de turno». Además insistirán en que todos los bienes de especial relevancia cultural sean declarados, salvo que conste expresamente su propiedad, como bienes de dominio público.