Ambos, con la autoridad que confiere toda una vida dedicada al estudio de las religiones, son autores de un libro titulado Los misterios de Jesús, en el que tratan de arrojar luz ( y muchas veces lo consiguen) sobre los oscuros comienzos del cristianismo. El libro se documenta en una amplísima bibliografía.
Una alegoría espiritual
Según Freke y Gandi, Jesucristo fue una alegoría espiritual creada por un reducido grupo de hebreos, que, descontentos con Jehová por su crueldad y arbitrariedad, aspiraban a la "gnosis", al conocimiento, a través de la espiritualidad. El grupo se denominó los gnósticos. Pero pronto surgieron las divergencias dentro del grupo entre los que deseaban la espiritualidad como fuente del saber y los que preferían el poder, los llamados literalistas. El triunfo definitivo de los literalistas, que aniquilaron a los gnósticos, llegó cuando el emperador Constantino convirtió al cristianismo en religión del Imperio. Pero para Constantino, que seguía siendo pagano, adepto al culto (persa) de Mitra, el cristianismo era poco atractivo para el pueblo al carecer de dioses y de diosas.
El Padre Nuestro
En el Concilio de Nicea (325), los "obispos" cedieron a medias a los deseos de Constantino. Ocupó el lugar de diosa intermediaria la Virgen María, copiada literalmente de la diosa egipcia Isis (tres mil años antes de nuestra era). En el siglo IV, un equipo anónimo escribió los llamados "evangelios", según los dos autores anglosajones, obras puramente de ficción, atribuidas igualmente a evangelistas inventados. Los evangelios se componen en gran parte de plagios de otras religiones, en especial la del culto a Isis, Osiris y Horus y a Dionisio (dios-hombre griego). Así, el Padre Nuestro es una oración egipcia de Horus, quien también pronunció un sermón de la montaña (tres mil años antes que el Cristo de los Evangelios). En Internet (Google), bajo "Did Jesus exist?" puede hallarse más información al respecto.
El 25 de diciembre
El empeño principal de los anónimos autores de los evangelios -por lo demás, una obra ética y literariamente nada despreciable- era darle un marco humano al Jesús (Jeshua) inventado por los gnósticos como alegoría. Con retales de informaciones de dos siglos de antigüedad y a través de la lectura del Talmud, los "escritores" hallaron una familia donde situar a Jesús (la de la joven Maria y su esposo José, el carpintero) y así, poco a poco, fueron construyendo una figura humana (que a la vez sería divina, como quería Constantino). Curiosamente, Jesús nace el 25 de diciembre, en un pesebre y con pastores, al igual que otros hombres-dioses como Horus y Dionisio.
Solsticio de invierno
En la antigüedad, el 25 de diciembre se celebraba una gran fiesta (bacanal) por ser el día del solsticio de invierno. Muy probablemente, las boda de Canaam sería la de Jeshua (aunque no está dicho que la novia fuese María Magdalena), pero como a la Iglesia no le convenía que Jeshua (dios hombre) estuviese casado como todo hebreo de su edad, los escritores de los evangelios convirtieron a Jeshua en invitado. ¿Qué hacía la madre de Jeshua en esa boda con su hijo? Por lo demás, ya los critícos romanos del cristianismo se reían de los presuntos milagros de Jesús, la mayoría conocidos por la antigua magia egipcia e incluso en el culto de Dionisio.
Los nacionalcatólicos
Los continuadores del "literalismo" (que tanta sangre han derramado hasta hacer de El Vaticano el poderoso Estado que es hoy), los católicos reaccionarios o los nacionalcatólicos españoles siguen empeñados en mantener la supremacía del catolicismo sobre el Estado. Exigen que la religión sea asignatura obligatoria para poder someter a un lavado de cerebro, que ya empieza en la catequesis, a los jóvenes. Van a la caza de futuros seminaristas a quienes inculcar un engaño que ya dura dos mil años. Para concluir una cita. El papa León X escribió (en latín): "¡…cuántos beneficios nos ha reportado esa farsa de Cristo!"
*Manuel Moral es periodista. Durante 40 años dirigió el programa en español de la radiodifusión alemana (ARD) desde Radio Baviera en Munich. Y no ha dejado de ejercer en ese ámbito, aunque está retirado.