La votación de hoy en el Congreso sobre la moción de ERC para instar al Gobierno a cambiar la Ley Orgánica de Libertad Religiosa de 1980, puede arrojar sorpresas. El cambio de posición del PSOE, apoyando la moción, y la necesidad de que asistan todos los diputados al Pleno, son dos elementos que pueden incidir en que el resultado final se decante en uno u otro sentido.
El nuevo PSOE de Pedro Sánchez ha cambiado la posición que los socialistas habían venido manteniendo en los últimos años. Desde que Zapatero en 2010 dio marcha atrás en su intención de revisar esta normativa, esta formación política había aparcado el debate. Ahora está dispuesto a reformar la ley e incluso a denunciar los Acuerdos con la Santa Sede, como ayer aseguró el secretario de Justicia y Libertades, Andrés Perelló.
La izquierda radical catalana está convencida de que esta moción se va a aprobar hoy. Tras el debate del martes, ERC cuenta con el apoyo del PSOE, Podemos, PdeCat y Bildu. En total, 175 votos. En contra de la moción se han posicionado el PP, Ciudadanos, PNV y Coalición Canaria. El mismo número de votos en contra, 175. Por lo tanto, todo dependerá de las ausencias que hoy se produzcan en el Congreso.
Sociedad más laica
Esta formación política sostiene en la exposición de motivos de su iniciativa que «es necesario avanzar en una sociedad más laica, en la que la ciudadanía pueda ejercer sus derechos en condiciones de libertad e igualdad». Igualmente, señalan que «todas las instituciones del Estado deben mantener una actitud de neutralidad religiosa».
ERC sostiene que «la laicidad debe ser vista, básicamente, como un hecho positivo, como una oportunidad, no solo para regular la libertad de pensamiento y de conciencia, sino también para actualizar una ley claramente obsoleta de libertad religiosa, sobre la base y con sometimiento, sobre todo, al principio de igualdad y al de libertad».
También creen que la ley actual está «obsoleta», ya que, a su juicio, «omite en su regulación y aplicación otras opciones de conciencia diferentes de las religiosas y deja al margen de toda regulación el tratamiento de la libertad ideológica».
El Gobierno no la cambiará
Finalmente, señala que «debe garantizarse una igualdad de trato de todas las opciones de conciencia para garantizar la libertad de pensamiento, sean o no de carácter religioso».
El Ejecutivo ya advirtió a ERC que no tiene previsto modificar esta ley, ya que a su juicio garantiza la libertad y es un «modelo de referencia» en otros países de Europa.
Entre las medidas que esta formación nacionalista cree necesario aplicar se encuentra la retirada de los crucifijos de los centros escolares y de los cargos públicos en las celebraciones religiosas.