El presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, ha asistido al funeral en recuerdo y homenaje a las víctimas del coronavirus Covid-19 en la Catedral de Sevilla, cuya eucaristía ha estado presidida por el arzobispo, monseñor Juan José Asenjo. Una misa en la que han estado presentes las principales autoridades autonómicas y municipales, así como los familiares de las víctimas. Minutos antes se celebrarse la misa, Moreno ha mostrado el reconocimiento y afecto, en su nombre y en el de todos los andaluces, a las víctimas por el coronavirus.
El arzobispo de la Diócesis de Sevilla, Juan José Asenjo, ha transmitido este jueves el pésame de la Iglesia a las familias de las víctimas del coronavirus en la provincia sevillana, durante la misa funeral que se ha celebrado en la catedral hispalense.
Una ceremonia a la que han asistido unas 600 personas, la mayoría familiares de los fallecidos, además de autoridades autonómicas, encabezadas por el presidente de la Junta, Juanma Moreno (PP), de la ciudad, con el alcalde, Juan Espadas (PSOE); el presidente de la Diputación, Fernando Rodríguez Villalobos (PSOE); o la delegada del Gobierno en Andalucía, Sandra García (PSOE), además de la presidenta del Parlamento , Marta Bosquet (Cs), y los grupos parlamentarios.
Todos los asistentes han acudido a la catedral con mascarilla, excepto los sacerdotes que, junto a Asenjo, han concelebrado el funeral y las voces del coro, separados en sillas en lugar de sentados en bancos, al mismo tiempo que tenía lugar una celebración similar en todas las iglesias al amparo de la archidiócesis sevillana.
La Misa de Réquiem en re menor, K. 626 de Wolfgang Amadeus Mozart, terminada a la muerte del compositor en 1701 por Franz Xaver Süssmayr e interpreta por el coro de la Universidad de Sevilla y la Orquesta Sinfónica Hispalense, ha servido de acompañamiento a una celebración en la que Asenjo ha admitido que “muchos de nosotros, aturdidos por la magnitud de la tragedia, hemos llorado por los muertos, solidarios con sus familias, llenos de temor por los enfermos, rezando por el personal sanitario, con medios escasos y mucha generosidad, como otros servidores públicos, militares y civiles”.
El arzobispo ha tenido palabras de recuerdo para las personas mayores que han fallecido por culpa de la pandemia, citando que “por todos ellos y por nuestros ancianos, que tanto han trabajado por una España mejor y a los que tanto debemos, hemos levantado los brazos al cielo, pidiendo que cese tanto sufrimiento”.
“Queridos familiares, esposos, esposas, hijos, padres y hermanos de todos los sevillanos fallecidos en nuestra Archidiócesis a causa de la epidemia y que hoy lloráis su muerte: os manifiesto la condolencia más sincera de la Iglesia en Sevilla, de sus obispos, sacerdotes, religiosos y laicos”, ha dicho.
Por último, ha aludido a la patrona de Sevilla, la Virgen de los Reyes, a la que ha pedido su intercesión ante los enfermos todavía hospitalizados, y que “premie el esfuerzo de tantos héroes anónimos, civiles y militares, que han expuesto sus vidas al servicio de los enfermos, y premie también la dedicación de las autoridades y dé éxito a los investigadores que preparan fármacos eficaces”.