La escena se repite a diario en el Consejo de la Sharia de Regent Park en pleno Londres. El proceso que debe atravesar una mujer para poder casarse según las normas del Corán
El hecho no ocurrió en una corte religiosa de Arabia Saudita, de Irán o de Afganistán. Sucedió en uno de los tribunales que las mezquitas del Reino Unido disponen para sus seguidores. En la actualidad, hay 85 de estos lugares para que los musulmanes que viven alrededor de Gran Bretaña puedan resolver sus conflictos domésticos y religiosos.
Aunque no se encuentren en países fundamentalistas, estas cortes cuentan con los mismos reglamentos que enMedio Oriente, y tratan de aplicar sus medievales tradiciones en pleno siglo XXI en Occidente. El diario británico DailyMail recopiló historias de mujeres que expusieron sus casos de violencia familiar y fueron tratadascon desdén y burla en algunos casos. La figura femenina está profundamente relegada según las leyes islámicas. La sharia es más estricta para ellas.
En el Consejo de la Sharia de la Mezquita de Regent Park, las consultas de mujeres y matrimonios se multiplican. Una pareja se acerca a uno de los clérigos, el más joven del lugar, que los escucha con detenimiento. Le exponen su problema: la mujer se había divorciado de su primer esposo según las leyes británicas y no pudo hacerlo según la Talaq, tal como se llama el “trámite” en el islam. Cree que quizá su actual enlace sea inválido por ese motivo. ¿Podría estar viviendo en adulterio? Ese es su temor y quiere resolverlo antes de que sea demasiado tarde. Sabe que en Londres no la someterán a un linchamiento público, pero podría ser condenada en su comunidad y vivir como una paria.
Furgan Mahmood, el joven clérigo, mira a la pareja con rostro serio. Los evalúa y piensa. Finalmente les advierte: “Será un caso difícil. Consultaremos a nuestros maestros para darles una respuesta“. Al cabo de unos minutos, Mahmood regresa luciendo su impoluta túnica blanca. La propuesta deja al matrimonio confundido y consternado. La solución es aplicar la Nikah Halala, un proceso de “reconstrucción” del matrimonio por el cual la mujer vuelve a estar en condiciones de casarse. Por medio de esta ley, la pareja deberá divorciarse, un paso que permitirá a otro religioso declarar el primer matrimonio de la mujer nulo. Luego, antes de volver a casarse con su actual esposo, deberá unirse con un tercer hombre con quien mantendrá una relación temporaria.