Mediante un proyecto de ley y reforma constitucional. El ultra conservador Viktor Orban suele utilizar los ataques a las minorías sexuales o étnicas para sus campañas políticas.
La ministra Justicia, Judit Varga, presentó un proyecto de ley y una enmienda constitucional para impedir la adopción por parejas del mismo sexo, lo que restringirá más los derechos de la comunidad LGTB+ en ese país. En 2011, se incorporó a la Constitución que el matrimonio es «la unión de una mujer y un hombre».
La reaccionaria propuesta de enmienda constitucional, publicada en la web oficial del Parlamento, afirma que Hungría garantiza el desarrollo del niño de acuerdo con su género al nacer e incluye la definición de que «la madre es mujer, el padre es varón».
La ministra de Justicia justificó la propuesta diciendo que «las nuevas y modernas tendencias ideológicas del mundo Occidental ponen en peligro el derecho de los niños para un desarrollo sano». La reforma propuesta por el Gobierno ultraconservador establecería en la Carta Magna que Hungría asegura que los niños reciban una educación basada en valores cristianos.
La nueva ley impondría que solo los matrimonios heterosexuales puedan adoptar en el futuro, aunque la ministra de Políticas Familiares podría otorgar ese derecho en algunas excepciones.
La comunidad LGTB+ del país denunció que las propuestas del Gobierno impone nuevas limitaciones a sus derechos y una nueva estigmatización. Según la Sociedad Háttér, de defensa de los derechos LGBT+ las propuestas son «contrarias a los principios internacionales y europeos sobre derechos humanos».
El Gobierno del ultraderechista Viktor Orbán puedo aprobar la actual Constitución húngara, aprobada con la mayoría parlamentaria, que entró en vigor en 2011. En la misma se determina al matrimonio como la unión de una mujer y un hombre.
Las restricciones impuestas por el agravamiento de los contagios por la pandemia vienen impidiendo que se expresen protestas contra estos proyectos. No está definido cuándo será el debate y la votación de las polémicas propuestas en el Parlamento húngaro.
Según un informe de la Asociación Internacional de Lesbianas, Gays, Bisexuales, Trans e Intersex (ILGA) de mayo de este año, la situación de las comunidades LGTB+ en Hungría empeoró en los últimos años y se sitúa en el puesto 27 entre 49 países europeos