El Gobierno ha cedido a presiones religiosas y estudiará si la propuesta de Ley contra el odio LGTBI vulnera o no sus derechos religiosos. Importantes lideres evangelistas llevan adelante en todo el mundo una cruzada contra la diversidad sexual.
La Federación de Entidades Religiosas Evangélicas de España (FEREDE) llevó su propuesta al Gobierno y logró que el Pleno de la Comisión Asesora de Libertad Religiosa (CALR) (órgano consultivo del Gobierno presidido por el ministro de Justicia, Rafael Catalá) se comprometa a estudiar si la Proposición de Ley contra la discriminación por orientación sexual e identidad de género y de igualdad social de lesbianas, gais, bisexuales, transexuales, transgénero e intersexuales (LGTBI), presentada en mayo por grupos de la oposición, podría vulnerar el derecho a la libertad religiosa. La Proposición de Ley fue iniciativa del Grupo Parlamentario de Unidos Podemos-En Comú Podem-En Marea e irá al Pleno del Congreso a partir de septiembre donde se decidirá si se admite a trámite.
“Queremos la misma libertad y respeto para todos los ciudadanos, sea cual sea su ideología, algo que esta Ley impedirá si se aprueba”, dicen desde FEREDE. La petición fue redactada por Mariano Blázquez Burgo, vocal de la CARL y representante legal de FEREDE, que considera que de aprobarse esta propuesta -que sería similar a dos leyes autonómicas, una aprobada en 2016 en la Comunidad de Madrid y otra aprobada en 2014 por el Parlamento catalán– se rompería “la neutralidad debida de las Administraciones Públicas en lo ideológico y también en lo religioso”.
La petición está en consonancia con otras iniciativas de iglesias evangélicas a lo largo del mundo, como la de un influyente pastor estadounidense que promovió un boicot contra McDonald’s por usar la bandera LGTBI para promocionar sus productos, o un legislador peruano evangelista que celebró una conferencia en el Congreso en contra de la homosexualidad. También en países como Brasil, Chile o República Dominicana, la proliferación de estas iglesias llega acompañada por lo general de discursos de tinte homófobo, aunque no todos sus pastores promuevan la homofobia. También se han manifestado en contra de lo que llaman ideología de género en África y en países europeos, como en Italia o, ahora, en España.
El representante de FEREDE también manifiesta preocupación por lo que considera “el apoyo explícito que estas normas suponen al lobby gay, y por la sumisión que los partidos políticos parecen estar mostrando a la presión que dicho lobby ejerce, permitiendo que sea el propio colectivo LGTBI el que redacte este proyecto de ley que será tramitado sin debate ni reflexión por parte de los partidos políticos y otros colectivos de la sociedad civil”.
Desde el grupo de Unidos Podemos en el Congreso dijeron a bez.es que la redacción de la propuesta se llevó a cabo mediante el trabajo conjunto “con colectivos de lucha por los derechos LGTBI, no con un lobby, como todas las propuestas que hacemos y que las levamos a cabo con colectivos sociales”.
La entelequia del lobby gay
La insistencia en la existencia de un presuntamente poderoso grupo de presión pro LGTBI (lobby gay) es desmentida por el sociólogo y activista de COGAM José Antonio Vela.
“Los científicos sociales tenemos un consenso en que el lobby gay no existe, si no el colectivo estaría mejor, tendría beneficios fiscales como tienen las iglesias, y cosas por el estilo. Para que haya un lobby debe de haber un grupo de poder apoyando, y eso no sucede, como sí sucede en el caso de las iglesias“, explica Vela a bez.es.
Según Vela, este tipo de postulados son, principalmente, ilegales y constitutivos de delito, en especial uno de la propuesta de FEREDE referente a “el derecho a la educación de los hijos conforme a las propias creencias”.
“Yo no tengo derecho de criar a un hijo el el odio, el machismo o el racismo, porque estoy atentando contra los derechos del menor; es más, si inculco el odio en mis hijos estoy creando un protodelincuente, puesto que es probable que ese odio salga por algún lado”, explica.
Ante la consulta de bez.es, desde FEREDE se remitieron al contenido del comunicado sin efectuar comentarios adicionales.
La propuesta para que la CALR elabore un informe sobre la Proposición de Ley contó con el apoyo de otras confesiones que integran la comisión, como la Iglesia Católica, la Federación de Comunidades Judías de España (FCJE), la Comisión Islámica de España (CIE), la Federación de Comunidades Budistas y la Iglesia Ortodoxa de España.
Además, la Alianza Evangélica Española, ante la Proposición de Ley difundió un comunicado en que define la propuesta como anticonstitucional e inició una petición en contra de ella en la plataforma Change.