La vicepresidenta primera del Gobierno y ministra de Presidencia, Relaciones con las Cortes y Memoria Democrática, Carmen Calvo, ha señalado que la subdirección para las relaciones con las confesiones, dependiente de su cartera, contará con un “pequeño crecimiento” de 1,5 millones de euros en su presupuesto para el plan de acción en 2021, para garantizar la libertad religiosa y de creencias, que pasa de 1,75 a 1,9 millones de euros.
“Dedicaremos una parte de nuestros esfuerzos económicos pero, particularmente, del trazado de los objetivos políticos en relación, a las competencias sobre la libertad religiosa, la diversidad religiosa de nuestro país“, ha indicado Calvo este miércoles durante el debate de la Ley de Presupuestos Generales del Estado para 2021.
La vicepresidenta primera ha recordado que la subdirección general de relaciones con las confesiones, que se ubicaba antes en el Ministerio de Justicia, ahora se encuentra bajo el paraguas del Ministerio de la Presidencia, Relaciones con las Cortes y Memoria Democrática.
Esta subdirección, según ha destacado, se dirige “a seguir trabajando en orden a la igualdad y el respeto del derecho a la libertad religiosa de los españoles y españolas y el derecho a no tener ninguna creencia religiosa”.
De este Ministerio, según ha precisado, depende la Fundación Pluralismo y Convivencia y el Observatorio del Pluralismo Religioso, que “gestiona una parte importante de la preservación de este derecho fundamental y se dedica a la normalización de la diversidad”.
Asimismo, ha añadido que se dedica a “apoyar a las administraciones locales, a veces con elementos particularmente delicados y sensibles a todos en cada conciencia como: cementerios, lugares de culto, vía publica y otras cuestiones que afectan a un derecho fundamental tan importante como la libertad de creencias”.
Calvo ha asegurado que, como ministra de Presidencia, se ha dirigido “de forma respetuosa” a “todas las confesiones” que mantienen relaciones con el Estado, “desde la Conferencia Episcopal y el nuncio de la Santa Sede” a “todas las demás por igual independientemente de la práctica numérica libre de cada español” y “por igual en términos de dignidad y respeto”.