La oposión de izquiedas no la apoyado exigían que la Iglesia devolviese los bienes que ya ha inmatriculado
La norma entra en vigor desde su publicación en el BOE
Para el ponente, la Iglesia es responsable del «mayor expolio del patrimonio histórico del país»
El Congreso envía al Senado la reforma de la Ley Hipotecaria y de la Ley del Catastro Inmobiliario por la que se prohíben las inmatriculaciones de bienes a las que podía acogerse la Iglesia, con el apoyo de PP, UPyD, PNV y UPN, el voto en contra de PSOE e Izquierda Plural y la abstención de CiU. Entre las novedades que se han aprobado este miércoles se renuncia a esperar un año desde la entrada en vigor de la nueva regulación para prohibir esas inmatriculaciones, a propuesta de los populares.
La justificación del PP es que «la ‘vacatio legis’ prevista era excesiva», un aspecto del que precisamente la oposición ya había avisado durante el trámite parlamentario.
Según el proyecto de ley esta norma deberá entrar en vigor el 15 de noviembre de 2015, salvo este aspecto, que podrá ponerse en marcha al día siguiente de su publicación en el BOE.
Desde la oposición, han pedido al Gobierno en sus respectivas enmiendas que la Iglesia Católica devuelva los bienes que ha inmatriculado a lo largo de estos años.
El diputado del PSOE Víctor Morlán ha insistido en que hace falta aclarar qué propiedades han sido inmatriculadas por la Iglesia en las últimas décadas porque «da la impresión de que están mal» registrados y que se trata de «bienes demaniales de dominio público».
Amnistía registral
Representantes de Redes Cristianas, Plataforma de Defensa del Patrimonio Navarro, Europa Laica y la Plataforma Mezquita-Catedral enviaron un escrito en enero a los grupos parlamentarios en el que les instaban a presentar un recurso de inconstitucionalidad contra la vigente Ley Hipotecaria, y antes de que culminase su reforma en el Congreso, para evitar que se «consolidase la inmatriculación de bienes inmuebles, como la Mezquita Catedral de Córdoba, y que tenga lugar una amnistía registral de los bienes que han sido expoliados por la Iglesia».
El objetivo de esta iniciativa era, según sus responsables, frenar «el mayor expolio del patrimonio histórico del país por la Iglesia Católica, propiciado por el artículo 206 de la Ley Hipotecaria de 1946 que permite a los diocesanos inscribir bienes a su nombre sin acreditar título de dominio alguno».
Las votaciones
La norma ha contado con los votos de PP, UPyD, PNV y UPN, tras modificar el texto original con las 43 enmiendas parciales de los ‘populares’ y tres cambios pactados con la formación magenta y Unión del Pueblo Navarro.
Por su parte, tanto el PSOE –que presentó enmienda de totalidad al proyecto de ley– como la Izquierda Plural (IU-ICV-CHA) han votado en contra del proyecto de ley, al criticar entre otros asuntos que no se revisen las inmatriculaciones realizadas por la Iglesia Católica en las últimas décadas, y a las que ahora se pone fin.
Además, Convergència i Unió (CiU) ha optado por la abstención como queja tanto por la presentación minutos antes del inicio de la comisión de algunos cambios más a propuesta del PP, como por la no aceptación de ninguna de sus enmiendas parciales, lo que a su juicio demuestra un talante poco inclusivo por parte del partido que da sustento al Gobierno.