Por presionde del ayuntamiento de Jerusalén
Una conferencia sobre la creciente violencia de los judíos contra los cristianos en Tierra Santa, prevista inicialmente en el museo de la Torre de David, tuvo que celebrarse en otro lugar debido la «presión» desde el seno del ayuntamiento de Jerusalén. El rabino jefe de la ciudad criticó el evento y el vicealcalde utilizó la acusación favorita de muchos judíos cada vez que alguien se queja de algo respecto a sus actuaciones: «antisemitismo».
Una conferencia centrada en los ataques contra los cristianos en Tierra Santa, programada para ayer en el museo de la Torre de David en Jerusalén, se celebró en un lugar diferente al previsto inicialmente a raíz de «presiones» por parte de altos funcionarios del municipio. Fuentes locales apuntaron a algunos allegados del alcalde Moshe Leon, que supuestamente amenazaron con «expulsar» al director de las instalaciones, Eilat Lieber, si no se cancelaba el evento. Acusaciones negadas por los responsables, para quienes «jamás ocurrió nada de esto», a pesar de que los organizadores tuvieron que reprogramar el encuentro en otro lugar.