Bizkaia y Bilbao han rendido su homenaje anual a la «Amatxu» de Begoña, con decenas de miles de personas que han peregrinado desde la madrugada hasta la basílica en honor a la patrona de Bizkaia.
La de la Virgen de Begoña es una de las tradiciones religiosas más arraigadas en Bizkaia, con miles de peregrinos que se desplazan durante la madrugada y la mañana desde todos los pueblos del territorio, muchos de ellos a pie, hasta la basílica para honrar a la patrona de Bizkaia.
Durante toda la jornada, desde la madrugada, se han celebrado misas de forma continuada con la basílica atiborrada, en un ambiente festivo alrededor del templo con puestos de los tradicionales productos vascos, como el talo y las rosquillas, y actuaciones.
La misa mayor, la de las doce del mediodía, ha sido oficiada por el obispo de Bilbao, Mario Iceta, y ha contado con la asistencia del alcalde de la villa, Juan Mari Aburto, y concejales de PNV, PSE-EE y PP, todos ellos portando la medalla de la ciudad.
Baile del alcalde
Tras el oficio, el alcalde ha bailado el «aurresku» en homenaje a los peregrinos y al conjunto de los bilbaínos, en una actuación seguida por centenares de personas.
Aburto ha destacado que el de hoy es un «día especial, de tradición y de la gente, que desde la madrugada y primeras horas recorren los diversos caminos de Bizkaia en dirección a la basílica».
El alcalde ha aprovechado la ocasión, a dos días del inicio de la Aste Nagusia, para pedir que «las fiestas dee este año sean simplemente fiestas, sin agresiones y donde la Aste Nagusia sea sinónimo de respeto, integración, participación y diversidad».
