La ley, que contempla penas de hasta seis meses para los infractores, es la primera que proscribe específicamente esos medicamentos en Estados Unidos
El gobernador de Wyoming, Mark Gordon, dio este viernes un paso más en el clima generalizado de ataques contra la libertad reproductiva de las mujeres en Estados Unido al aprobar una ley que prohibe el uso de las píldoras abortivas en ese Estado del Medio Oeste. Las mujeres que las usen se enfrentan a penas de hasta seis meses de cárcel y multas de unos 8.400 euros. El político republicano también pasó un proyecto de ley que restringirá la mayoría de interrupciones de embarazo salvo para los casos de violación, incesto o cuando la vida de la madre está en riesgo.